viernes, 16 de mayo de 2014

El amor de pareja tras la muerte


Los Documentos son claros en muchas partes al declarar que los resucitados "no se casan ni se dan en matrimonio". Aquello también sale registrado en los Evangelios bíblicos.

(419.2) 38:2.2 Aunque los serafines son seres muy afectuosos y comprensivos, no son criaturas con emociones sexuales. Son en gran parte como seréis vosotros en los mundos de estancia, en los que «ni os casaréis ni seréis dados en casamiento sino que seréis como los ángeles en el cielo». Porque todos los que «sean tenidos por dignos de llegar a los mundos de estancia ni se casan ni se dan en casamiento; porque no pueden ya más morir, pues son iguales a los ángeles». – L.U

Sin embargo, a raíz de otro párrafo muy interesante de los Documentos L.U (que cito a continuación) algunos lectores han deseado inquirir más sobre sus enigmáticas palabras. Cabe señalar que dicho párrafo está sin duda limitado porque es difícil de explicar a nuestra mente retrasada y aferrada a la carne como si fuese lo único que existe, y personalmente noto un esfuerzo de los reveladores por transmitir en el lenguaje humano algo que solo podremos comprender y experimentar plenamente en el “otro lado”. Por lo tanto, mis comentarios en relación a esa parte de los Documentos están evidentemente también limitados y por eso coloco los respectivos (?) y las "comillas" para destacar que nuestras palabras solo aspiran a una aproximación.

(516.1) 45:6.3 En los siete mundos de estancia, los mortales ascendentes tienen amplia oportunidad para compensar cualquier privación experiencial sufrida en sus mundos de origen, debida a la herencia, medio ambiente o terminación prematura desafortunada de la carrera en la carne. Esto es verdad en todo sentido, excepto en la vida sexual mortal y sus ajustes correspondientes. Miles de mortales llegan a los mundos de estancia sin haberse beneficiado particularmente de las disciplinas derivadas de relaciones sexuales normales en sus esferas nativas. La experiencia en los mundos de estancia provee escasa oportunidad para compensar estas privaciones muy personales. La experiencia sexual en un sentido físico ya no es posible para estos ascendenteros, pero en asociación estrecha con los Hijos e Hijas Materiales, como individuos y como miembros de su familia, estos mortales sexualmente deficientes consiguen compensar los aspectos sociales, intelectuales, emocionales y espirituales de su deficiencia. Así pues todos los mortales que por circunstancias o juicio erróneo han sido privados de los beneficios de una asociación sexual ventajosa en los mundos evolucionarios, aquí en las capitales del sistema tienen plena oportunidad para adquirir estas experiencias mortales esenciales en asociación estrecha y amante con las excelsas criaturas sexuales adánicas que residen permanentemente en las capitales del sistema.

Las palabras citadas se refieren a nuestra estadía en Jerusem, que es al finalizar la capacitación de los primeros 7 mundos de estancia. Ahora bien, ¿significa lo anterior que alguién que no haya podido tener una asociación sentimental y sexual apropiada en la tierra podrá tener un breve romance temporal con un Adán o Eva planetario (son los llamados Hijos Materiales y habitan un sector de Jerusem)? 

 Y ¿Podrán quiénes eran cónyuges o pareja “convivir” juntos en la carrera ascendente?

Pues bien, analicemos las frases. Se nos dice que:

 "La experiencia sexual en un sentido físico ya no es posible para estos ascendenteros"

Por lo tanto, no hay una contradicción con la información que asegura que no hay matrimonios y sexualidad física entre los resucitados. Esto también es evidente porque en otras citas se nos deja claro que la sexualidad física está ligada al cerebro y cuerpo material que perecen en la carne.

"pero en asociación estrecha con los Hijos e Hijas Materiales, como individuos y como miembros de su familia, estos mortales sexualmente deficientes consiguen compensar los aspectos sociales, intelectuales, emocionales y espirituales de su deficiencia".

En otras partes se nos indica que los resucitados en Jerusem pueden ser asignados a observar a las criaturas adánicas y trabajar con sus familias, y recibir cierta capacitación de ellos. Observemos los párrafos precedentes:
(515.7) 45:6.1 Los Hijos e Hijas Materiales, juntamente con sus hijos, presentan un espectáculo encantador que no deja jamás de estimular la curiosidad y atraer la atención de todos los mortales ascendentes. Son tan similares a vuestras propias razas materiales sexuales, que ambos encontráis muchos intereses en común que atraen vuestros pensamientos y ocupan vuestras temporadas de contacto fraternal.
(515.8) 45:6.2 Los sobrevivientes mortales pasan mucho de su tiempo libre en la capital del sistema, observando y estudiando los hábitos de vida y la conducta de estas superiores criaturas sexuales semifísicas, porque estos ciudadanos de Jerusem son los patrocinadores inmediatos y mentores de los sobrevivientes mortales desde el momento en que éstos logran la ciudadanía en los mundos sede central hasta que se despiden para dirigirse a Edentia.
¿Notamos? El contacto con los Hijos Materiales (que miden como tres metros) en Jerusem tiene que ver con observar el modelo perfeccionado y superior de lo que es una "pareja" junto a sus hijos (se les denominan  familias,  y son realmente superlativas e ideales). Sin duda nos traerá los recuerdos de nuestra vida en la tierra. Y puesto que ellos se vuelven nuestros mentores en Jerusem, nos enseñarán unas "técnicas" (?) que compensarán en relación a la sexualidad humana terrestre:
 "los aspectos sociales, intelectuales, emocionales y espirituales de su deficiencia"
Y no solo eso, sino quiénes también no fueron padres en la tierra tendrán que pasar cierto tiempo viviendo como invitados en las familias de los Hijos materiales:
(516.3) 45:6.5 Los seres intermedios ascendentes y los serafines evolucionarios deben pasar a través de esta experiencia de paternidad en asociación con los Hijos e Hijas Materiales de la sede central del sistema. Así tales seres ascendentes no reproductores obtienen la experiencia de la paternidad al ayudar a los Adanes y Evas de Jerusem en la crianza y enseñanza de su progenie.
(516.4) 45:6.6 Todos los sobrevivientes mortales que no han experimentado la paternidad en los mundos evolucionarios también deben obtener esta capacitación necesaria durante su período de estadía en las casas de los Hijos Materiales de Jerusem y como asociados paternales de estos estupendos padres y madres. Esto es necesario excepto si dichos mortales hayan sido capaces de compensar sus deficiencias en la guardería infantil del sistema, ubicada en el primer mundo de cultura transicional de Jerusem.
 (517.1) 45:6.8  Este servicio de ministerio paternal puede ser acreditado más tarde en Jerusem hacia la satisfacción de la mitad de la capacitación que dichos ascendenteros necesitan cumplir en las familias de los Hijos e Hijas Materiales.
Notamos que hasta los ángeles y otros seres también adquieren en los hogares de los Hijos Materiales una capacitación. Y los resucitados que no criaron hijos trabajan en estas familias para obtener el modelo perfecto de la experiencia y concepto de una familia superlativa.

"Así pues todos los mortales que por circunstancias o juicio erróneo han sido privados de los beneficios de una asociación sexual ventajosa en los mundos evolucionarios, aquí en las capitales del sistema tienen plena oportunidad para adquirir estas experiencias mortales esenciales en asociación estrecha y amante con las excelsas criaturas sexuales adánicas que residen permanentemente en las capitales del sistema".
Pero notemos que dichas experiencias están enfocadas en compensar los "los aspectos sociales, intelectuales, emocionales y espirituales de su deficiencia" pero no replicar el acto sexual en sentido físico tal como se presenta en la Tierra ya que  "La experiencia sexual en un sentido físico ya no es posible para estos ascendenteros".

Nosotros aquí en la Tierra deberíamos preguntarnos  (sin el veneno y distorsión de la pornografía o el erotismo) que obedece realmente a lo que subyace tras una relación sexual. Es cierto que en un sentido biológico tiene que ver con perpetuar la especie o liberar la libido. Sin embargo, cuando una pareja hace el amor en sentido superlativo es más que una cuestión física, se produce un fenómeno de "perderse en el tiempo sin tiempo enfocados en ese instante". Hay un serie de sentimientos supremos de amor y sincronicidad espiritual. Como dicen los documentos  están "los aspectos sociales, intelectuales, emocionales y espirituales" en torno a la sexualidad normal.


Pues bien, cuando trabajamos en algo que nos fascina "nos absorvemos en el momento presente" y nos enfocamos en ese punto. Pues los Hijos Materiales tienen unas técnicas que usan entre ellos en dónde existe una "conexión mental" (?) que trasciende al acto físico. Esto provoca un "placer" y "creación" infinitamente superior y más satisfactorio que el acto físico o sexual tal como lo entendemos tan básicamente en la tierra. En otras palabras, dos personas pueden conectarse "telepaticamente" (?) sin tocarse y unir sus almas en un espacio tiempo instantáneo de forma sublime. (No olvidéis que las palabras me limitan al intentar explicar esto).

Este tipo de "sexo" es enseñado para los pupilos que no tuvieron una experiencia análoga en la Tierra, y dicha capacitación ocurre en Jerusem, al finalizar el recorrido por los primeros siete mundos.

De hecho, el séquito del príncipe (que eran alumnos resucitados de Jerusem) aprendieron al parecer éstas técnicas de los Hijos Materiales y sorprendentemente estas "relaciones sexuales" "mentales" produjeron una prole cuando ellos estuvieron en la Tierra:

(855.4) 77:1.2 Conviene tener siempre presente que los autootorgamientos sucesivos de los Hijos de Dios en un planeta evolutivo producen marcados cambios en la organización espiritual del reino y algunas veces modifican el funcionamiento de la interrelación de las acciones espirituales y materiales de tal forma que crean situaciones efectivamente difíciles de comprender. El estado de los cien miembros corpóreos del séquito del Príncipe Caligastia constituye un ejemplo de estas mismas interrelaciones singulares: En calidad de ciudadanos morontiales ascendentes de Jerusem, eran criaturas supermateriales sin prerrogativas de reproducción. En calidad de servidores planetarios descendentes en Urantia, eran criaturas sexuales materiales, capaces de procrear prole material (tal como lo hicieron posteriormente algunos de ellos). No nos explicamos satisfactoriamente cómo estos cien miembros pudieron desempeñar la función de progenitor a nivel supermaterial; sin embargo, eso es precisamente lo que sucedió. La unión supermaterial (no sexual) de un varón y una mujer del séquito corpóreo resultó en la aparición del primogénito de los seres intermedios primarios.

Los nietos directos de Adán y Eva (los Hijos Materiales que fracasaron en la Tierra)  también experimentaron una variante de esa técnica:

(862.6) 77:6.2 Entre los hijos de Adansón hubo justamente dieciseis de los peculiares progenitores de los seres intermedios secundarios. Había la misma cantidad de hombres que mujeres entre estos hijos singulares, y cada pareja era capaz de producir un ser intermedio secundario cada setenta días por una combinación de técnicas de unión sexual y no sexual. Jamás había sido posible en la tierra este fenómeno antes de esa época, tampoco ha vuelto a producirse nunca.
Dichas uniones "psíquicas" o "mentales" (las palabras me limitan) produjeron a los seres intermedios.


(535.3) 47:4.7 Las deficiencias biológicas fueron en gran parte corregidas en el primer mundo de estancia. Allí se corrigieron los defectos de la experiencia planetaria pertenecientes a la vida sexual, la asociación familiar, y la función de los progenitores o se proyectaron para la rectificación futura entre las familias de los Hijos Materiales en Jerusem.

Por lo tanto, al resucitar la mayoría de nuestras tendencias biológicas desarmónicas de índole animal como los celos, la posesividad y la visión limitada de la vida familiar, comienzan a ser corregidas tras la desaparición del cerebro físico. Y las carencias del alma en torno a los "los aspectos sociales, intelectuales, emocionales y espirituales" son llenadas en las familias de los Hijos Materiales al llegar a la capital tras finalizar el recorrido de los siete primeros mundos en los cuales ya hemos obtenido una visión ampliada de la familia cósmica.

Pero, ¿será posible conservar algún tipo de asociación o compañerismo con quién fué nuestro cónyuge en la Tierra?


Un matrimonio tal como lo entendemos en la Tierra no persiste en los mundos de estancia, pero si aquellas afinidades emocionales, mentales y espirituales entre los hombres y mujeres.

El matrimonio es realmente una institución social humana de la Tierra. Aquí tiene su papel y justificación. Dios no casa a la parejas y tampoco las divorcia. Esas transacciones son puramente terrenales.

Sin embargo, hay aspectos espirituales, de compañerismo y afinidad mental que hace que dos personas ya progresen en la Tierra como un equipo de trabajo en el desarrollo del alma, y que ciertamente son transferibles a los mundos de estancia.

(939.1) 84:6.6 Los hombres y las mujeres se necesitan mutuamente en sus carreras morontiales y espirituales así como también en sus carreras mortales. Las diferencias de puntos de vista entre hombres y mujeres persisten aun más allá de la primera vida y a lo largo de las ascensiones en el universo local y en el superuniverso. Aun en Havona, los peregrinos que otrora fueran hombres y mujeres seguirán ayudándose mutuamente en el ascenso al Paraíso. Nunca, ni siquiera en el Cuerpo de los Finalistas, será la metamorfosis de la criatura tan grande como para borrar las tendencias de personalidad que los humanos llaman hombre y mujer; siempre continuarán estas dos variaciones básicas de la humanidad a atraerse, estimularse, alentarse y asistirse mutuamente; siempre dependerán de su cooperación mutua en la solución de los difíciles problemas del universo y en sobreponerse a las múltiples dificultades cósmicas.

En los mundos ascendentes gradualmente la diferenciación entre hombre y mujer se tornan similares a lo que son las polaridades:

(938.9) 84:6.5 La diferencia de naturaleza, reacción, puntos de vista y pensamiento entre hombres y mujeres, en vez de ocasionar preocupación, debería ser considerada altamente beneficiosa para la humanidad, tanto individual como colectivamente. Muchas órdenes de criaturas del universo son creadas en fase dual de manifestación de la personalidad. Entre los mortales, los Hijos Materiales y los midsonitas, esta diferencia se describe como hombre y mujer; entre los serafines, querubines y Compañeros Moronciales, ha sido denominada positiva o enérgica, y negativa o introvertida. Estas asociaciones duales multiplican grandemente la versatilidad y se sobreponen a las limitaciones inherentes, de la manera en que lo hacen ciertas asociaciones trinas en el sistema Paraíso-Havona.

No olvidad por lo tanto:

"Nunca, ni siquiera en el Cuerpo de los Finalistas, será la metamorfosis de la criatura tan grande como para borrar las tendencias de personalidad que los humanos llaman hombre y mujer; siempre continuarán estas dos variaciones básicas de la humanidad a atraerse, estimularse, alentarse y asistirse mutuamente; siempre dependerán de su cooperación mutua en la solución de los difíciles problemas del universo y en sobreponerse a las múltiples dificultades cósmicas".

La esencia de tu género y personalidad nunca desaparecerá completamente y ámbos serán necesarios y compañeros en la eternidad.

Por lo tanto, si me preguntáis si algún tipo de "relación" o compañerismo persistirá entre quiénes fueron cónyuges en la Tierra la respuesta finalmente dependerá del tipo de relación que tienes ahora con tu pareja más allá del cascarón válido del "matrimonio" o "pareja" (que es a fin de cuentas una asociación justificada para éste mundo).

Por eso existe esta pregunta: ¿qué tipo de relación ahora tienes realmente con tu pareja?

Para mantener un compañerismo con tu pareja que sobreviva a la muerte depende en gran medida del tipo de relación o asociación para el progreso del alma que tienes en la carne en la actualidad. 

Hay matrimonios que solo los une el básico y pasajero asunto sexual para luego no hablarse por días, a otros la idea y miedo de sentirse solos los ha precipitado a contraer un matrimonio sin sentir y comprender que esa persona no encaja realmente como su compañero en el viaje del alma, porque estar acompañado físicamente de alguien no significa que esa persona esté realmente en tu alma como compañero de trabajo para la misma.   Otros se casan por despecho, otros precipitados por la adolescencia y sus experimentos, otros obligados, etc. Hay mucha gente que se casa con la persona equivocada en la carne. Y la cantidad de divorcios lo demuestra.

Ahora bien, finalmente la armonía espiritual, mental, y las afinidades de la mente y el alma como compañeros es lo que trascenderá a la muerte.

Aquellas relaciones de pareja que no están fundadas en estos pilares posiblemente no persistirán en los mundos moronciales.

Por que es en la vida morontial cuando la vida del alma sale del interior del hombre y crea ciertamente hasta su nuevo cuerpo.

En la vida moroncial aprendemos que lo que estaba realmente en el interior es lo que forma la realidad y compone hasta el nuevo cuerpo. Los abrazos y apegos físicos básicos son de origen animal, y en esta vida aparecen mezclados con nuestras emociones y el alma. Pero éstas últimas cualidades espirituales, el potencial interno del alma es lo que se expandirá hacia afuera en la resurrección.

Si una pareja, si un matrimonio logra esa sincronía en la carne, si logran verse como verdaderos compañeros para el trabajo del alma, seguramente continuarán su compañerismo ya no como un matrimonio, sino de una forma diferente, más sublime, especial y gloriosa en una asociación que los puede llevar hasta el mismo Havona.

Y quizás hasta un compañero que haya avanzado primero, puede aguardar a su colega en el séptimo mundo, antes de partir a la capacitación final en Jerusem con los Hijos Materiales:


(538.8) 47:9.3 Aquí comienza la formación de las clases que se gradúan para Jerusem. Habrás pasado de mundo en mundo como individuo, pero ahora te preparas para partir hacia Jerusem en grupos, aunque, dentro de ciertos límites, un ascendentero puede elegir permanecer en el séptimo mundo de estancia por cierto tiempo con el objeto de aguardar la llegada de un miembro rezagado de su grupo de trabajo terrestre o del mundo de estancia.

Y esa es precisamente la clave. Un "compañero de trabajo" en el adelanto espiritual y del alma es lo que sobrevive a la muerte y mantiene una relación, aunque ésta cambie de "forma" .

Pero no nos equivoquemos. La forma en como experimentamos el amor cambiará considerablemente, ya que los limitados pensamientos del temor, la soledad,  la posesividad o exclusividad son dejados atrás como infantiles. En los mundos superiores también conoceremos a otros amigos y estableceremos relaciones que no son románticas, pero que también contribuyen al desarrollo del alma. Estarán los ángeles, y maestros moronciales entre las muchas personalidades en aquellos grupos.

De hecho, al llegar al quinto mundo de estancia comenzaremos a asimilar la grandeza de los horizontes cósmicos que se abrirán ante nosotros:

(537.5. 47:7.5 Un verdadero nacimiento de la conciencia cósmica toma lugar en el mundo de estancia número cinco; estás evolucionando un punto de vista universal. Éste es realmente un período de horizontes en expansión. La mente en expansión de los mortales ascendentes comienza a darse cuenta de que un destino estupendo y magnífico, excelso y divino, aguarda a todos los que completan la ascensión progresiva al Paraíso, que tan laboriosamente pero tan regocijada y auspiciosamente ha comenzado. Aproximadamente en este momento el mortal ascendente promedio comienza a manifestar un entusiasmo experiencial sincero por la ascensión a Havona. El estudio se está volviendo voluntario, el servicio altruista se torna natural, y la adoración, espontánea. Está naciendo un verdadero carácter morontial; una verdadera criatura morontial está evolucionando.

Una perspectiva vasta y magnífica se abre ante los hombres y mujeres en la aventura eterna. Todos los anhelos serán sobrepasados y transformados en experiencias de logro sublime en el viaje hasta el Padre. Por que realmente la estadía en Jerusem también será temporal. Se nos preparará para la segunda fase del viaje hasta el Paraíso. Luego los compañeros iniciarán el viaje a las Constelaciones, y en las siguientes etapas conocer a Micael de Nebadon en la capital del universo local, luego el viaje a Orvonton, para posteriormente partir a la aventura de Havona. 

No nos preocupemos por el tiempo o las separaciones. El tiempo allá no se experimenta como aquí en la Tierra. El Padre tiene todo previsto para sus Hijos.