lunes, 5 de mayo de 2014

El Reino de Dios en el corazón

Recientemente un tema del sitio de los JW ha comentado categóricamente que el Reino de Dios no está en el corazón de las personas. Para esa afirmación nuevamente se ha recurrido a las expresiones de las Escrituras Hebreas de los Salmos, Isaías y Daniel. También al análisis del contexto de Lucas 17:21

Si realmente queréis saber que es el Reino de Dios en toda su dimensión no basta con utilizar de forma sesgada los textos del llamado Antiguo Testamento. Es esencial analizar todos los textos de los mismos Evangelios y las Cartas apostólicas. Para eso, le animo a revisar éstas entradas:

Buscar el Reino (Aquí se analiza también la expresión entos humon: "dentro de")


http://estudiosdelasescrituras.blogspot.com/2013/10/buscar-el-reino.html

El reino de los cielos es semejante a ...


http://estudiosdelasescrituras.blogspot.com/2013/10/el-reino-de-los-cielos-es-semejante-a.html

¿Qué es el Reino de Dios?


http://estudiosdelasescrituras.blogspot.com/2013/01/que-es-el-reino-de-dios.html

Siempre debemos tener presente que son las Escrituras Griegas Cristianas las que arrojan luz sobre los conceptos mesiánicos judaicos de un Mesías en un trono (que aparecen en la literatura hebrea). Jesús realmente utilizó la expresión "Reino" como una analogía. Uno de los post referidos comenta:

La expresión "Reino" utilizada por Jesús no debe simplificarse a un concepto humano tan básico como una simple monarquía. Jesús utilizó esa frase como una analogía para describir la expansión de la influencia del amor de Dios sobre la humanidad. Los judíos esperaban un reino material y Cristo usó esa misma frase para introducir la idea de un Reino espiritual y una fraternidad basada en el amor. De esa forma, Jesús les ayudaría con sabiduría  a erradicar sus ideas equivocadas al mostrarles que es lo que era y no era realmente el Reino de Dios. Y los escritos apostólicos muestran que las comunidades cristianas entendieron ese concepto familiar. 

Rom 14: 17: "porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo". 

Colosenses 1:13: "Él nos libró de la autoridad de la oscuridad y nos transfirió al reino del Hijo de su amor".

De lo contrario, no tendría sentido "buscar" algo que ya sabemos que está en los cielos lejanos. 

La predicación de las buenas noticias del Reino tiene que incluir necesariamente el corazón de lo que es ese Reino: Se debe hablar de la filiación con Dios, de sentir y descubrir la Paternidad de Dios en toda su amplitud y de experimentar que todos los hombres son Hijos de Dios. El mensaje debe consistir en mostrar estos asuntos en una dimensión real y práctica para la vida de cada persona. Se trata de ayudar al gran descubrimiento personal. 

Por lo tanto, cuando el creyente descubre esa filiación con Dios, ciertamente no es injusto decir que el Reino está en su corazón. Y el creyente que busca lo encuentra.

"Sin embargo, busquen continuamente el reino de él, y estas cosas les serán añadidas" - Lucas 12:31

"Otra vez: el reino de los cielos es semejante a un comerciante viajero que buscaba perlas excelentes.  Al hallar una perla de gran valor, se fue y prontamente vendió todas las cosas que tenía, y la compró" - Mat. 13:45,46.

Nuevamente el reino se nos presenta como una experiencia personal de búsqueda y descubrimientoSolo los buscadores de perlas excelentes, los aventureros de Dios, los sedientos del espíritu como tú estimado lector, a fuerza de buscar perlas, encuentran finalmente la perla de gran valor. Y al hallar la perla como lo más valioso, el regocijo lo hace dejar las cosas innecesarias y consagrarse al Padre en esa experiencia viviente.

19 ”Dejen de acumular para sí tesoros sobre la tierra, donde la polilla y el moho consumen, y donde ladrones entran por fuerza y hurtan. 20 Más bien, acumulen para sí tesoros en el cielo, donde ni polilla ni moho consumen, y donde ladrones no entran por fuerza y hurtan. 21 Porque donde está tu tesoro, allí también estará tu corazón. - Mateo 6

Notamos que en la Tierra podemos acumular tesoros en el cielo, y notamos que el corazón está vinculado a aquello.

Sabemos que el mismo Padre Universal no puede morar en su totalidad como persona en nuestro interior, pero él si nos ha regalado una fracción de él, su Espíritu, el cual como parte de ese mismo Reino (o dominio de Dios), tiene efectos positivos en nuestra alma:

Rom 14: 17: "porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo". 

"En unión con él, ustedes, también, están siendo edificados juntamente para [ser] lugar donde habite Dios por espíritu". - Efesios 2:22

Lamentablemente la W.T explica y reduce estos bellos conceptos como si fueran lecciones básicas de primaria y transforma al Reino en un simple gobierno administrativo monárquico en los cielos. Su falta de profundidad espiritual es evidente.

Cuando el creyente "entroniza" a Dios en su corazón, claramente éste se vuelve una morada activa del Padre, quién mediante su Espíritu provoca una transformación en él, ya que Dios como gobernante es aceptado por ese hombre que decide hacer la voluntad del Padre en su vida. Entonces, ciertamente el hombre tiene al Reino (dominación amorosa de Dios) en su corazón como algo viviente, y no como un concepto lejano.

20 Pero cuando los fariseos le preguntaron cuándo vendría el reino de Dios, les contestó y dijo: “El reino de Dios no viene de modo que sea llamativamente observable, 21 ni dirán: ‘¡Miren acá!’, o, ‘¡Allá!’. Porque, ¡miren!, el reino de Dios está en medio de ustedes”. - Lucas 17:20,21

Notamos que Jesús quería dejar claro que el Reino no era un asunto externo espectacular visible (como las ideas monárquicas judías). Cuando les dice a los fariseos que estaba "en medio de ellos" o "al alcance de ellos" significa que ellos tampoco estaban privados aún de aceptar dicho reino en su interior (los fariseos podían también descubrir el reino tal como Nicodemo y José de Arimatea posiblemente se hicieron discípulos)

La expresión  en el griego koiné  entos humon  literalmente significa “dentro de ti”  (aunque también podría traducirse  "a tu alcance" o "entre ustedes") Por lo tanto, indica que el Reino ya era una realidad presente al alcance de todos los hombres. 

En otras palabras, Jesús dijo que el Reino no se manifiesta de un modo apocalíptico llamativo después de iniciado el siglo XX. Indica que es una realidad presente aún en sus días, y que está al alcance de todos.