jueves, 28 de enero de 2016

Nuevos conceptos: Los seres espirituales

Los Documentos nos otorgan una información revelatoria muy distinta a las creencias comúnmente aceptadas por las religiones humanas. Por ejemplo, normalmente entendemos que un ser espiritual es algo etéreo, nebuloso y casi inexistente. Sin embargo, la realidad es todo lo contrario.

(498.6) 44:0.15 Todas estas actividades de los mundos morontiales y espirituales son reales. Para los seres espirituales el mundo espiritual es una realidad. Para nosotros el mundo material es lo más irreal. Las formas de espíritus más elevadas pasan libremente a través de la materia común. Los espíritus elevados no reaccionan a nada material, excepto a algunas de las energías básicas. Para los seres materiales el mundo espiritual es más o menos irreal; para los seres espirituales el mundo material es casi totalmente irreal, siendo tan sólo una sombra de la substancia de las realidades espirituales.

Notamos que para las realidades celestiales que son las verdaderas, lo llamado “espiritual” es lo auténticamente real, más “sólido” y “tangible” que lo material. Los seres espirituales elevados atraviesan la materia como si no existiera. Pueden pasar a través tuyo, incluso sin percatarse que estás aquí.

(498.7) 44:0.16 Yo no puedo, con visión exclusivamente espiritual, percibir el edificio en el cual esta narrativa está siendo traducida y registrada. Un Consejero Divino desde Uversa, que al azar se encuentra a mi lado, percibe aún menos de estas creaciones puramente materiales. Discernimos de qué manera se os presentan estas estructuras materiales visualizando una contraparte espiritual presentada a nuestra mente por uno de los transformadores de la energía aquí presentes. Este edificio material no es exactamente real para mí, un ser espiritual, pero es muy real y muy útil para los mortales materiales.

Es como si los seres espirituales nos pudiesen percibir con mucha dificultad y ayuda auxiliar como vapor o gases. Esta visión es muy interesante, ya que los fantasmas, los fugaces seres temporales que viven en el espacio y tiempo, seríamos en realidad nosotros. 

Nosotros somos fantasmas en la realidad universal, y tal como declara la cinta Interestelar, parece ser que el Amor (que para nosotros es subvalorado), se presenta precisamente como la realidad “sólida” al otro lado y que nos conecta con la Dimensión Divina superior. Y ciertamente la comunión espiritual con Dios y los procesos de adoración y oración interna también nos elevan para “tocar” sintiendo la otra realidad, la auténtica.

Desde el punto de la física esto también es real. Si pudiésemos visualizar la materia a nivel cuántico solo veríamos electrones separados por amplios espacios orbitando núcleos. A nivel atómico la materia no es realmente “sólida” tal como la vista humana parece procesarla.

Por estas razones es tan interesante que los Reveladores declaren que la creencia humana en fantasmas o seres etéreos que atormentan a los humanos es una fantasía total que esclaviza la mente humana.

(958.2) 87:0.2 El hombre ha sostenido una larga y amarga lucha con el culto a los fantasmas. Nada, en la historia de la humanidad inspira mayor lástima que este cuadro de la esclavitud abyecta del hombre al temor de los espíritus-fantasmas.

La razón es que solo los seres Intermedios son los únicos entes de naturaleza material sólida que son invisibles a los humanos. No hay almas en pena, ánimas ni demonios etéreos como el viento que atormenten a los humanos. Esos miedos son el mal entendimiento de fenómenos de la naturaleza y del pavor ancestral ampliado por la misma mente creativa humana. 

Sin embargo, los verdaderos seres de naturaleza espiritual consideran irreal a lo material, ellos son más “sólidos” y “perdurables” que nosotros, fugaces criaturas del tiempo. Sería un absurdo que intentasen asustarnos moviendo cosas, ya que para ellos las mismas cosas materiales no existen y en la mayoría de los casos no las ven.

Lamentablemente la humanidad aún sigue con una esclavitud mental que la encadena a estos miedos, y es difícil liberarse de las limitantes del lenguaje impreciso. Hay hasta lectores veteranos en el libro de Urantia que han usado en más de alguna conferencia expresiones como “materia menos densa” en referencia al mundo espiritual. En realidad lo "menos denso" desde la perspectiva universal sería nuestro estado en esta dimensión.

La verdad es que tardaremos tiempo en depurar nuestros patrones mentales, ya que tenemos la herencia de las religiones evolutivas milenarias, con un gran peso sobre nosotros.