sábado, 26 de marzo de 2016

Respuestas breves sobre la Cena del Recuerdo

¿Cuales son los significados de los emblemas en la última Cena? ¿Quiénes pueden participar? ¿Cuando deben hacerlo sus seguidores? ¿Fué un 14 de Nisán?

Los emblemas son para conmemorar en recuerdo a través de las edades la visita de Jesús a nuestro mundo. El pan representa su vida encarnada en la semejanza de la carne mortal, y el vino es el espíritu de la verdad que nos trae a la mente y el corazón las enseñanzas y vida de Jesús que nos inspiran a vivir vidas significativas. Pueden participar de este recuerdo todos aquellos que en su corazón deseen recordar apreciativamente al Maestro y tener comunión espiritual con él. La Cena del Recuerdo no es para reafirmar las esperanzas particulares de las personas, ni para manifestar la separación de algún grupo selecto, sino para Recordar la donación y autootorgamiento de Jesús. El es el centro de la cena del recuerdo. Y la podemos realizar las veces que queramos, cuantas veces deseemos libremente hacerlo en el año. Jesús nunca instituyó un ritual mecánico. No es necesario usar un pan especial ni un vino especial. Estos símbolos son elementos para recordar, no debe enfocarse tanto la atención en ellos como para desviarnos del verdadero sentido de recordar a Jesús.

Jesús tampoco realizó su cena la noche de la Pascua Judía. Habría sido imposible que le arrestaran esa noche, funcionara el Sanedrín y hubiese gente en la calle, y se desarrollara un juicio, tal como relatan los mismos Evangelios. Todas esas actividades estaban prohibidas en la Pascua. Jesús hizo su Conmemoración un día antes (12-13 de Nisán) y trató de desvincularla de la Pascua Judía. No había cordero en la Cena, utilizó pan con levadura, uso vino (un elemento que no aparece mencionado en el Éxodo cuando se establece la Pascua, aunque este elemento posteriormente fue introducido por los judíos). De alguna forma quiso transmitir una sencilla conmemoración sin establecer una reglamentación rígida, tal como ha ocurrido lamentablemente hoy con las Iglesias que dicen representarlo. Jesús se apresuró a tener una reunión íntima e informal con sus apóstoles porque sabía que su prendimiento era inminente. El Evangelio de Juan es el que recoge con mayor exactitud la despedida íntima de los apóstoles y el Maestro.

Para más información recomiendo la lectura del Documento 179

"La última Cena"

http://www.urantia.org/es/el-libro-urantia/documento-179-la-ultima-cena