sábado, 18 de marzo de 2017

El propósito de las razas planetarias

En determinadas épocas de la Humanidad las razas de color son  esenciales para el desarrollo de la tolerancia humana y el altruismo. Cuando el hombre enfrenta algo aparentemente diferente es impulsado a Amar de forma más altruista y abnegada, su dimensión del amor se amplia desde su cerrado núcleo familiar hasta la diversidad humana.

82:6.10 (920.8) Considerado desde un punto de vista biológico, los sangik secundarios eran en ciertos aspectos superiores a las razas primarias.

También cada raza tiene potenciales y singularidades que provocan una compensación entre ellas. Por ejemplo, raza índiga es más resistente a los rayos UV. También tiene mayor resistencia física. Pero tienen mayores dificultades grupales (menos dotados) para crear civilización y estructuras sociales más grandes y amplias, del tamaño de naciones. Pero he dicho grupales o colectivas, porque como individuos, y así lo demuestra el caso del Profeta Orvonon, pueden lograr grandes avances y grados de culturas, aunque estas parezcan estancadas.

82:6.2 (919.8) De las seis razas sangik de color, tres eran primarias y tres secundarias. Aunque las razas primarias —azul, roja y amarilla— eran en muchos aspectos superiores a las tres gentes secundarias, debe recordarse que estas razas secundarias tenían muchos rasgos deseables que hubiesen elevado considerablemente a los pueblos primarios si se hubieran podido absorber sus cepas mejores.

En estos casos, en los milenios siguientes en un largo proceso, la fusión y amalgama entre todas las razas provoca un beneficio para la Humanidad, que posteriormente recibe el empujón final con la raza violeta de Adán.

El objetivo principal de la misión del Príncipe Planetario y sus Maestros era Educar para potenciar lo mejor de las seis razas humanas. El mejoramiento racial era principalmente educativo. De alguna forma, la Educación (espiritual, social, y material) logra potenciar las cualidades positivas de cada raza, evitando que los elementos antisociales y deteriorados se ceben dentro de ellas y se transmitan ya sea mediante genética o herencia social racial.

Lo anterior fracasó en parte dada la traición del Príncipe Planetario que paralizó y casi arruinó este propósito de las razas por medio millón de años. Posteriormente la infusión de la raza adanita fue interrumpida por la falta de Adán, y los adanitas se expandieron de forma limitada por el mundo (aunque sus pocas huellas fueron impresionantes como sale en la Entrada que reúne las Crónicas de los Anditas).

Otro concepto que conviene aclarar es que actualmente no sobrevive de forma pura ninguna de las seis razas originales. La raza roja, naranja, azul, índiga, amarilla y verde eran realmente de esos colores. Los Documentos son clarísimos y contundentes:

82:6.1 (919.7) Hoy en día no hay razas puras en el mundo. Los pueblos de color primitivos y originales tienen tan sólo dos razas representativas que persisten en el mundo —el hombre amarillo y el hombre negro— y aun estas dos razas están muy mezcladas con los pueblos de color ya desaparecidos. Aunque la así llamada raza blanca desciende predominantemente del antiguo hombre azul, está mezclada más o menos con todas las otras razas así como lo está el hombre rojo de las Américas.

Por ejemplo, los hombres rojos originales eran muy altos, prácticamente
gigantes, diferentes a los amerindios actuales que son más bajos y de tonalidad menos roja que sus ancestros. Los hombres azules eran realmente azulados casi celestes, y no son los caucásicos modernos o nórdicos, aunque éstos son sus descendientes modificados por los mestizajes con tribus adyacentes primitivas, noditas y adanitas. Los amarillos fueron modificados por los rojos, y también por la raza andita posterior.  Los verdes y naranjas prácticamente se extinguieron en épocas tempranas por guerras tribales, y alcanzaron a ser absorbidos por los índigos. Y los índigos que eran de un azul oscuro,  no son los negros actuales, sino que representan una mezcla de índigo, verde y naranja.

Las decenas de etnias y nuevas razas actuales son el resultado de las mezclas en mayor o menor grado de las anteriores. Las razas actuales de color son una mezcla residual de las seis anteriores, más las inyecciones posteriores de los noditas, adanitas y anditas, y no son exactamente las mismas.

De alguna forma, el programa de fusionar las razas ha progresado, pero también fue enormemente retrasado, porque igualmente hay ciertos grupos humanos que tienen mayor porcentaje que otros en cuanto a razas. Por ejemplo, lo caucásicos actuales tienen mayor carga de la raza azul, y los negros modernos de los índigos antiguos. Esto hace que aún haya polaridades que en el futuro deben ser reducidas mediante el mestizaje.

82:6.8 (920.6) Durante los últimos cien años ha habido más hibridación racial en Urantia que lo que ocurriera durante miles de años. El peligro de desarmonías burdas como resultado de la fecundación cruzada de las cepas humanas ha sido grandemente exagerado. Los problemas fundamentales de los «mestizos» se deben a los prejuicios sociales.

Así quiénes han leído otras partes de los Documentos y no los han entendido juzgándolos como racistas o eugenésicos raciales, aquí tienen estos párrafos extremadamente claros que indican lo contrario.

82:6.6 (920.4) La mezcla de razas contribuye grandemente a la aparición repentina de características nuevas, y si tal hibridación es la unión de cepas superiores, entonces esas nuevas características serán también rasgos superiores.

82:6.11 (921.1) Después de todo, el verdadero peligro para la especie humana ha de encontrarse en la multiplicación sin restricciones de las cepas inferiores y degeneradas de los varios pueblos civilizados más bien que un supuesto peligro inherente a la mezcla interracial.

El problema son los individuos antisociales o degenerados que han dañado su genética de forma irreparable (quizás con drogas y una estructura social destructiva transmisible) dentro de las mismas razas, que la cruza de razas entre sí.

82:6.3 (920.1) El prejuicio actual contra los «híbridos», «mestizos» y «medias castas» surge del hecho de que la fecundación cruzada moderna se produce en su mayor parte entre cepas burdamente inferiores de las razas. También se produce una progenie insatisfactoria cuando las cepas degeneradas de la misma raza se casan entre sí.

82:6.4 (920.2) Si las razas de hoy en día de Urantia pudieran librarse del peso de las capas inferiores de seres deteriorados, antisociales, de mente débil y abandonados, no habría objeción a una amalgama limitada de las razas. Y si tales mezclas de raza pudieran ocurrir entre los tipos más elevados de las varias razas, habría aún menos objeciones.

82:6.7 (920.5) Hasta tanto las razas presentes estén tan sobrecargadas con cepas inferiores y degeneradas, la mezcla interracial en gran escala sería altamente perjudicial, pero la mayoría de las objeciones a dichos experimentos corresponden a los prejuicios sociales y culturales más bien que a las consideraciones biológicas. Aun entre las cepas inferiores, los híbridos son frecuentemente una mejora respecto de sus antepasados. La hibridación produce una mejora de la especie debido al papel de los genes dominantes. La mezcla interracial aumenta la posibilidad de que un gran número de los deseables genes dominantes estén presentes en el híbrido.

Cuando hacemos un esfuerzo por entender bien los Documentos y leerlos en su totalidad nos llevamos muchas sorpresas. Cómo vemos, éstos alientan la mezcla interracial ojalá entre los individuos más nobles de las mismas razas. El hecho de las migraciones forzosas de personas en el mundo, aumentará la mezcla racial en los próximos siglos.

Notemos lo que se dice de los inmigrantes incluso ya en los años treinta en EEUU:

82:6.5 (920.3) La hibridación de las cepas superiores y disímiles es el secreto de la creación de cepas nuevas y más vigorosas. Esto es cierto entre las plantas, los animales y las especies humanas. La hibridación aumenta el vigor e incrementa la fertilidad. Las mezclas interraciales de las capas medias o superiores de varios pueblos aumentan considerablemente el potencial creador tal como se demuestra en la población presente de los Estados Unidos de Norteamérica.

Las frases anteriores hablan más que mil palabras. Lo que hizo a EEUU una nación superior fue la integración de personas inmigrantes de varias razas con cualidades nobles.




El secreto para emprender la mejora racial de la Humanidad radica entonces en la Educación y en algunas mejoras espirituales y sociales que han de potenciar a la Humanidad.