”Aquí es donde entra la inteligencia que tiene sabiduría: Las siete cabezas significan siete montañas, sobre las cuales se sienta la mujer. Y hay siete reyes: cinco han caído, uno es, el otro todavía no ha llegado, pero cuando sí llegue tiene que permanecer un corto tiempo. Y la bestia salvaje que era, pero no es, también ella misma es un octavo [rey], pero proviene de los siete, y se va a la destrucción. – Rev. 17: 9-11
Se ha comentado que las siete cabezas son siete potencias sucesivas del poder mundial de gobernación sobre el pueblo de Dios. Esta idea ha sido planteada por la Sociedad Watchtower. Se habla de Egipto, Asiria, Babilonia, Medo-Persia, Grecia, y Roma (“uno es” en tiempos de Juan), el imperio Angloamericano actual sería “el otro todavía no ha llegado”. Además se comenta que ésta bestia salvaje de color escarlata en sentido general es la ONU (la actual Organización de las Naciones Unidas).
El problema de ésta interpretación radica en la conexión de las seis potencias políticas anteriores (Egipto, Asiria, Babilonia, Medo-Persia, Grecia, Roma), con la ONU, la cuál sería la totalidad de la Bestia. Al respecto el pasaje citado dice:
Y hay siete reyes: cinco han caído, uno es, el otro todavía no ha llegado, pero cuando sí llegue tiene que permanecer un corto tiempo. Y la bestia salvaje que era, pero no es, también ella misma es un octavo[rey], pero proviene de los siete, y se va a la destrucción.
Notemos que la bestia salvaje es un octavo rey, y que proviene de los siete. Pero, ¿La ONU es un producto de las potencias mundiales ya borradas del mapa? Es interesante que solo Estados Unidos y Gran Bretaña sean los únicos países de la lista que participaron en la creación de la ONU. El resto ya habían desaparecido de la faz de la tierra hace siglos. No podría decirse con justicia que la ONU proviene de seis potencias inexistentes hace siglos. Podríamos encontrar una explicación forzada (apelando a la herencia histórica, etc), pero la claridad del versículo se impone.
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Además, notemos lo siguiente: “Las siete cabezas significan siete montañas, sobre las cuales se sienta la mujer”. Cómo notamos, se habla de cabezas sobre las cuales se sienta la mujer (tiempo presente). Esto significa que son potencias o países existentes (en el tiempo del fin) que han tenido la influencia reciente de Babilonia la Grande. Además, los diez cuernos están repartidos en la totalidad de las cabezas. Si seis potencias ya no existen, entonces tampoco la mayoría de los cuernos deberían existir, ¿no cree? Pero, la profecía nos habla de un ataque futuro de dichos diez cuernos, lo cual nos indica que la bestia y sus cabezas siguen activas hasta cierto punto. No podrían ser entonces potencias borradas del mapa.
Pero, y ¿qué sucede con la frase “cinco han caído”? ¿Acaso no indica que se habla de reinos que ya no existen? En absoluto. La caída de un reino no significa su desaparición (En cambio, Asiria o Medopersia definitivamente ya no existen). El que hayan caído significa que han perdido gran protagonismo global principal (que incluso perdieron poderío monárquico), pero aún se mantienen gobernando, mientras la sexta cabeza ahora lleva la delantera.*
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* Nota: En el pasado, cuando Babilonia tomó el predominio mundial, aún se mantenían activas (pero con menos poder) potencias como Egipto y Asiria. De hecho, Egipto se mantuvo como reino hasta la época de Roma. .
Pero, y ¿qué sucede con el “uno es”? ¿Acaso no habla de la Roma en tiempos de Juan? No necesariamente. Para entender ésta frase no debemos olvidar que Juan está viviendo los sucesos proféticos como si hubiese sido transportado al futuro, y habla en tiempo presente, pero él no está en su tiempo correspondiente a él. Apocalipsis está lleno de ésos casos. Por ejemplo, cuando se habla de la gran muchedumbre, se comenta en un espacio temporal como si la gran muchedumbre ya hubiese salido de la tribulación (Rev. 7: 13,14). En Revelación 12: 9 se dice que “hacia abajo fue arrojado el gran dragón”, cómo si en la época de Juan hubiese ocurrido eso, pero sabemos que esto es una visión del futuro. Cuando se habla de los juicios, se dice que los hombres “no se arrepintieron para darle gloria” (Rev. 16:9) como si Juan estuviese hablando en tiempo presente de un suceso aún muy lejano para su tiempo verdadero. Revelación y otros libros proféticos, están llenos de esos ejemplos de atemporalidad profética. Por lo tanto, el “uno es” se refiere a la época en la cuál Juan es transportado: al tiempo del fin.*
* Nota: La misma Sociedad Watchtower utiliza esto al explicar Revelación 17:8, donde se dice que “La bestia salvaje que viste era” (Rev. 17:8). Se explica que esto no era en los tiempos de Juan (aunque él ángel le dice “que viste que era”), sino que tiene que ser con respecto al futuro.
La bestia salvaje, y sus cabezas
La visión y su contexto son claros. Solo en el tiempo del fin, en la época en que las buenas nuevas comienzan su expansión por toda la Tierra, ésta profecía se cumple. Las siete cabezas de la bestia serían siete potencias mundiales actuales, sobre las cuales “se sienta la mujer”. En otras palabras, hablamos de potencias en dónde la religión falsa ha tenido gran influencia en las últimas décadas. .
Cómo he comentado, esto no significa que sean potencias inexistentes. Más bien han caído porque se ha ido su predominio mundial o han perdido en alguna importante guerra*. A la vez, sin embargo, siguen teniendo cierta importancia, formando parte de la bestia salvaje total, dirigidas por la cabeza dominante actual, y siendo naciones influidas (“montadas”) por la religión en época contemporáneas.
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* Nota: Alemania, Italia, Japón, Gran Bretaña, la Unión Sovética han sido potencias independientes muy protagonistas durante el siglo XX y que perdieron influencia y liderazgo monárquico. Alemania perdió su Reich en la I y II Guerra Mundial, a Italia también le ocurrió algo semejante, Japón perdió su poder e influencia Imperial, y lo mismo ocurrió con Gran Bretaña (que perdió muchas colonias) y la Unión Soviética. Y todas éstas potencias perdedoras (han caído) han sido agrupadas como potencias financieras que se han integrado bajo el Liderazgo actual de Estados Unidos.
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Recordemos que Juan está transportado al tiempo actual. Al tiempo de las últimas potencias. El “uno es” sería la sexta cabeza. Y surge como potencia tras la caída de los “cinco”. Solo Estados Unidos sería ésta sexta cabeza, y hasta el día de hoy sigue siendo la cabeza dominante. Estados Unidos ha sido gran influenciado por la religión (“montado”) y tras la II Guerra Mundial el poder pasó claramente a esta nación. Las otras cinco anteriores han estado de acuerdo y han apoyado a ésta potencia. Estados Unidos también ha formado parte del grupo de los siete y los ocho. Entonces Estados Unidos sería la sexta potencia mundial actual y no la séptima. Los tribunales que están iniciando juicios sobre el Vaticano serían “cuernos” sobre esa Nación que nos demuestran como encajan todas las cosas. Sobre la Séptima Cabeza se dice:
“el otro todavía no ha llegado, pero cuando sí llegue tiene que permanecer un corto tiempo”
Éste reino seguramente actuará cuando los diez cuernos también odien a la Ramera e inicien su ataque. Éste reino será breve y puede corresponder al Rey del Norte. Esta Entidad coordinará a la Bestia Entera. Pero observemos que tampoco se dice que la sexta cabeza (Estados Unidos) caería. Solo que una séptima cabeza también aparecería por corto tiempo en el escenario global y tomaría el Liderazgo. ¿Son los 1260 días? Parece evidente. ¿Será la Alianza de China con las nuevas potencias emergentes?
Y la bestia salvaje que era, pero no es, también ella misma es un octavo [rey], pero proviene de los siete, y se va a la destrucción
Cómo notamos, solo las siete potencias actuales crean una especie de liga que actúa como un “octavo rey” (ella misma es un octavo rey y proviene de los siete). Son una bestia bermeja o escarlata ya que según muchos en conjunto tienen ideas socialistas. Está llena de nombres blasfemos porque se atribuyen la capacidad de resolver los problemas humanos. Solo el G-8 o alguna modificación de éste tras una gran crisis mundial, se asemejan a la visión. Ellos controlan en la práctica a la ONU y al Consejo de Seguridad. Pero no olvidemos que la existencia de ésta bestia (que es una variante modificada de la bestia de Revelación 13) tiene como objeto atacar al Vaticano, ya que pronto recibirá el poder y autoridad de los diez cuernos (tribunales en sus territorios o cabezas). Los tribunales supremos en dichas naciones darán una especie de concesión para que la liga de estas naciones se sienta con el respaldo judicial de devastar a la religión falsa, comenzando con el Vaticano.
La corroboración de Daniel
Para comprobar la teoría anterior debemos ver cómo la Biblia en casos anteriores ofrece la explicación. Nunca olvidemos el objetivo de las visiones. Las visiones y sus símbolos nos muestran escenas en movimiento como si fueran una película. Éstas nos hacen ver la importancia del análisis conceptual y visual de la imagen.
Cuando en Daniel 7 se habló del leopardo alado, se mostró que tenía 4 cabezas. Esas 4 cabezas sin duda representaban al Imperio Macedonio con sus cuatro generales a la cabeza. También indicaban la dirección global de las conquistas de ese Imperio. Aún cuando el gran reino de Alejandro se dividió en 4 zonas, éstas siempre siguieron siendo cuatro reinos existentes contemporáneos que formaban parte del Imperio Macedonio.
Igualmente cuando se habla del Carnero Medo-Persa con dos cuernos, son dos reinos coexistentes en el mismo periodo.
Esto nos confirma que las Siete Cabezas no pueden referirse a largos periodos de la historia humana y sucesivas potencias. Más bien, el símbolo, la secuencia y la composición de la bestia nos muestra a un organismo bestial viviente unificado que actúa y se mueve en el tiempo final, con un accionar definido.
Por ejemplo, de la misma Bestia con sus siete cabezas se nos dice que estaba en un abismo y luego resurge con actividad. Esto muestra que la Bestia es una entidad real con elementos coexistentes en la actualidad. Y toda la bestia viviente (con sus cabezas y cuernos) realizará un ataque hacia la Ramera demostrando su poder y vitalidad.
La corroboración de Daniel
Para comprobar la teoría anterior debemos ver cómo la Biblia en casos anteriores ofrece la explicación. Nunca olvidemos el objetivo de las visiones. Las visiones y sus símbolos nos muestran escenas en movimiento como si fueran una película. Éstas nos hacen ver la importancia del análisis conceptual y visual de la imagen.
Cuando en Daniel 7 se habló del leopardo alado, se mostró que tenía 4 cabezas. Esas 4 cabezas sin duda representaban al Imperio Macedonio con sus cuatro generales a la cabeza. También indicaban la dirección global de las conquistas de ese Imperio. Aún cuando el gran reino de Alejandro se dividió en 4 zonas, éstas siempre siguieron siendo cuatro reinos existentes contemporáneos que formaban parte del Imperio Macedonio.
Igualmente cuando se habla del Carnero Medo-Persa con dos cuernos, son dos reinos coexistentes en el mismo periodo.
Esto nos confirma que las Siete Cabezas no pueden referirse a largos periodos de la historia humana y sucesivas potencias. Más bien, el símbolo, la secuencia y la composición de la bestia nos muestra a un organismo bestial viviente unificado que actúa y se mueve en el tiempo final, con un accionar definido.
Por ejemplo, de la misma Bestia con sus siete cabezas se nos dice que estaba en un abismo y luego resurge con actividad. Esto muestra que la Bestia es una entidad real con elementos coexistentes en la actualidad. Y toda la bestia viviente (con sus cabezas y cuernos) realizará un ataque hacia la Ramera demostrando su poder y vitalidad.