miércoles, 19 de marzo de 2014

¿Cómo se resolverán los conflictos mundiales?


El Señor mediará entre los pueblos
    y resolverá conflictos entre naciones poderosas y lejanas.
Ellos forjarán sus espadas para convertirlas en rejas de arado
    y sus lanzas en podaderas.
No peleará más nación contra nación,
    ni seguirán entrenándose para la guerra.
 Todos vivirán en paz y prosperidad;
    disfrutarán de sus propias vides e higueras
    porque no habrá nada que temer. - Miqueas 4:3,4

Y los arcos de guerra serán quebrados; y hablará paz a las naciones; y su Señorío será de mar a mar, y desde el río hasta los fines de la tierra - Zacarías 9:10.

¿Cómo se producirán semejantes cambios? Se nos dice que las naciones seguirán existiendo, pero cederán su soberanía y capacidad de declarar la guerra a un poder superior de las alturas.
(1490.3) 134:5.17 Con el progreso científico, las guerras serán cada vez más devastadoras, hasta volverse prácticamente un suicidio racial. ¿Cuántas guerras mundiales habrán de librarse, cuántas ligas de naciones habrán de fracasar, para que el hombre esté dispuesto a establecer el gobierno de la humanidad, y empiece a disfrutar de las bendiciones de la paz permanente, y a recoger los frutos de la tranquilidad de la buena voluntad entre sí mismos —la buena voluntad mundial—?
(1487.9) 134:5.2 Las guerras en Urantia no han de acabar nunca mientras las naciones se afierren a las nociones ilusorias de ilimitada soberanía nacional. Tan sólo hay dos niveles de soberanía relativa en un mundo habitado: el libre albedrío espiritual del mortal como individuo y la soberanía colectiva de toda la humanidad. Entre el nivel del ser humano individual y el nivel de la humanidad total, todas las agrupaciones y asociaciones son relativas, transitorias y de valor, únicamente si mejoran el bienestar y el progreso del individuo y de la humanidad en conjunto —el hombre y la humanidad.
(1488.1) 134:5.3 Los maestros religiosos deben recordar siempre que la soberanía espiritual de Dios está por encima de todas las lealtades espirituales interpuestas e intermedias. Algún día aprenderán los gobernantes civiles que los Altísimos son quienes gobiernan en los reinos de los hombres.
Y es en esta parte, que los Hijos renacidos de Dios han de guiar a los líderes del mundo que habrán vuelto a experimentar el fracaso de las políticas nacionalistas, el separatismo, la autodeterminación y el enlazamiento de una Era materialista que ha de desplomarse.
(1488.2) 134:5.4 El reinado de los Altísimos en los reinos de los hombres, no es para el beneficio exclusivo de un grupo especialmente favorecido de mortales. No existe tal cosa como un «pueblo elegido». El reinado de los Altísimos, los supercontroladores de la evolución política, es un régimen formado con el objeto de fomentar el máximo bien, para el máximo número de hombres, y durante un tiempo de la máxima longitud.
(1489.1) 134:5.10 Urantia no disfrutará de una paz duradera hasta que las llamadas naciones soberanas no cedan inteligente y plenamente sus poderes soberanos en las manos de la fraternidad de los hombres —el gobierno de la humanidad.

(1491.2) 134:6.8 Las naciones de Urantia no han poseído una soberanía verdadera; no han tenido nunca una soberanía que las protegiera de los estragos y devastaciones de las guerras mundiales. Al crear un gobierno mundial de la humanidad, las distintas naciones no dejan su soberanía como tal, sino que crean en realidad una soberanía mundial verdadera y permanente, que de ahí en adelante podrá protegerlas de todas las guerras. Los asuntos locales serán manejados por los gobiernos locales; los asuntos nacionales, por los gobiernos nacionales; los asuntos internacionales serán administrados por el gobierno mundial.
Se acerca una crisis mundial sin precedentes, que hará emerger a los Maestros del Cuerpo de Reserva del Destino que estarán listos para guiar a la humanidad por el oscuro trayecto que le aguarda. Estas almas renacidas entonces proveerán la inspiración para un liderazgo inteligente que logre una reorganización completa del mundo donde las naciones realmente batirán sus espadas en rejas de arado.

Las mismas armas serán usadas como herramientas, la energía nuclear, las cabezas nucleares tendrán que ser ocupadas como herramientas de trabajo para la solución del problema energético del mundo. De esta forma, las armas como espadas serán transformadas en rejas de arado.