miércoles, 4 de septiembre de 2019

Nubes cósmicas y cambio climático

Polvo cósmico 

57:8.22 (662.9) Con este incremento en la elevación terrestre aparecieron las primeras diferencias climáticas del planeta. La elevación terrestre, las nubes cósmicas, las influencias de los océanos son los factores principales en la fluctuación climática.

Estas Nubes cósmicas parecen estar asociadas al llamado Polvo Cósmico, el cual agrupándose en ciertas zonas del espacio cercano a la Tierra, forman éstas nubes cósmicas.

Según una estimación, tanto como 40.000 toneladas de polvo cósmico alcanzan la superficie de la Tierra cada año. 

Las partículas de polvo pueden dispersar la luz de manera no uniforme. Los investigadores europeos que han analizado el polvo cósmico al pasar por la Tierra han comentado: «Los metales inyectados en la atmósfera a través de las partículas de polvo evaporadas son causa directa o indirecta de una serie de fenómenos».

Por ejemplo, los metales se condensan hasta formar un polvo muy fino denominado humo meteorítico, el cual influye en la formación de nubes noctilucentes. Estas nubes de hielo se generan en las regiones polares a una altura de ochenta y dos kilómetros en el verano. Los investigadores han dicho:  «Las nubes aparecieron (de hielo en la atmósfera) por vez primera en 1886 y su proliferación parece ser un indicio del cambio climático en la atmósfera media».

Se ha observado como por el planeta Mercurio transitan estas nubes de polvo cósmico e incluso han creado “anillos”. Con los instrumentos apropiados, estas finas partículas también podrían ser observadas cercanas a la Tierra. Parece claro que la Tierra atraviesa cada cierto tiempo éstas nubes cósmicas, las cuales provocarían o no un “calentamiento” momentáneo, un cambio climático:





Algunos también han señalado la entrada del sistema solar en una nube galáctica (asociada a los brazos de la Vía Láctea) y esto también implicaría que de forma cíclica (junto al Sol), el clima se pueda alterar: