Los hielos de la Antártida
ocultan algo muy inesperado, afirma un equipo de investigadores europeos. En su
estudio, los científicos analizaron las imágenes tomadas por el satélite GOCE
de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) –encargado de
crear un mapa gravitatorio de la Tierra.
Al comparar los datos obtenidos
por la misión de la ESA con el curso de las ondas sísmicas, los investigadores
europeos obtuvieron un mapa 3D de la zona. Asimismo, hallaron los llamados
cratones –fragmentos de continentes perdidos desde hace miles de millones de
años– bajo el hielo de la Antártida Oriental.
"Al este de la
Antártida vemos un emocionante mosaico de características geológicas que
revelan similitudes y diferencias fundamentales entre la corteza debajo de la
Antártida y otros continentes a los que se unió hasta hace 160 millones de
años", explicó Fausto Ferraccioli, del British Antarctic Survey.
Según concluyeron los
científicos, los restos hallados
probablemente están vinculados con la India y Australia. Gracias a este
histórico descubrimiento, "se puede mejorar nuestro conocimiento de la
estructura de la Tierra y sus fronteras remotas, como el continente
antártico", concluyeron los autores del estudio.
Lo anterior concuerda de
manera sorprendente con los Documentos:
58:4.3 (668.1) Hace
500.000.000 de años la vida vegetal marina primitiva estaba bien establecida en
Urantia. Groenlandia y la masa terrestre ártica, junto con América del Norte y
del Sur, empezaban su larga y lenta deriva al oeste. La África se desplazaba
ligeramente hacia el sur, creando un surco de este a oeste, la cuenca del
Mediterráneo, entre sí y el cuerpo materno. La Antártida, Australia y la tierra evidenciada por las islas del
Pacífico se desprendieron por el sur y el este y se han desplazado muy lejos
desde aquel día.
Así que efectivamente la Antártida y Australia estaban vinculadas.