jueves, 11 de julio de 2019

El mundo...y una visión correcta - parte 2


La entrada anterior quedó por analizar el importante factor de la perspectiva Histórica correcta para apreciar la época en la que vivimos. Al concluir, notaremos que el problema moderno es puramente existencial y espiritual.

Durante miles de años la Humanidad vivió épocas de barbarie y crueldad. El abuso hacia las mujeres y los niños eran exponencialmente mucho peor que en la actualidad. La esclavitud existió por milenios, y hasta el siglo XIX era socialmente aceptada por la cultura occidental.

La reconocida historiadora, Dra Barbara Tuchman quien escribió un excelente libro titulado "Un espejo distante" nos  muestra como el Siglo XIV fue muchísimo mas difícil en todos los aspectos que el siglo XX recién pasado. Guerras en prácticamente todo el mundo conocido hasta esa época fueron comunes (una de esas fue la llamada Guerra de los Cien años que duró 116 años).

Las condiciones climáticas del siglo XIV fueron tales que causaron varias hambrunas severas, además de grandes desastres naturales. En ese siglo se produjo la reconocida hambruna universal de 1315-1317. Otra serie de grandes hambrunas ocurrieron entre 1330 y 1340. Incluso se llegó el caso en que los cadáveres eran usados como alimento y hasta los padres se comían a sus hijos (Henry Lucas, "La gran hambruna europea de 1315,1316 y 1317", 1930, pag.343). Quizá lo más conocido del siglo XIV por la gran mayoría de las personas es la famosa "Muerte Negra" (la Peste Negra), peste que se inició en 1348 según la gran mayoría de los historiadores, y ha sido catalogada como la peor peste jamás experimentada por el hombre. Otras pestes también fueron comunes durante el siglo XIV como lo narra la Dra Tuchman.

No solo guerras, hambres y pestes a escala global se sucedieron en el siglo XIV. Grandes terremotos también fueron muy comunes como en la gran mayoría de épocas de la historia. Por ejemplo en el año 1348 en Europa se produjo uno de tal magnitud que las personas creyeron que se llegaba el fin del mundo (Charles Morris, " Narraciones históricas. El romance de la realidad", 1893, pag. 162). El científico H. Tazieff, elaboró una crónica histórica de sismos. El llego a la conclusión de que el Siglo XIV estuvo caracterizado por una gran cantidad de fuertes movimientos sísmicos destructivos (H. Tazieff, "Cuando la tierra tiembla", 1964. pag.155).

Además de lo mencionado, el crimen, la violencia y el temor fueron comunes en el siglo XIV. La piratería marítima estaba en todo su apogeo. La Dra Tuchman escribió que el bandolerismo y el vandalismo del siglo XIV fueron de tales proporciones que contribuyeron a la disminución de la población mundial al final del siglo XIV!

Con esta pequeña reseña de lo que fue el siglo XIV, esto nos hace reflexionar realmente hasta que grado  esta es la época mas crítica que ha experimentado la humanidad tal como muchos dicen.

Como dijo la Dra Tuchman: "Si nuestras ultimas dos décadas de asunciones colapsantes han sido un período de incomodidad inusual, es tranquilizante saber que la especie humana ha vivido a través de situaciones peores anteriormente". (pag. xiii). En realidad todas las generaciones han creído que su época es peor que las anteriores, pero la evidencia real es distinta.

No todo es perfecto. No todo está bien. No todo mejora a la velocidad que nos gustaría. Pero las cosas están mejor. Y mejor es bueno. El mundo nunca ha sido más sano, más educado, más tolerante, menos violento.

Hace casi 200 años una simple disputa se resolvía en un duelo a muerte. Era lo normal y hasta bien visto, era normado y apoyado por la sociedad. Hoy, las leyes y una mayor sensibilidad humana hacen el resto. Hoy, los crímenes tienen un impacto, no porque sean mayores que en la antigüedad; sino porque hay una mayor sensibilidad cerebral que hace que la Sociedad se impacte y vea de forma negativa estos hechos.

Aunque vivimos en una sociedad machista en algunos campos (cada vez más en retirada),  los derechos de la mujer han aumentado de forma exponencial en el último siglo. Hace 100 años solo un pequeño grupo de ellas en todo el mundo podía votar, hoy son una inmensa mayoría. No hay que remontarse tanto: hasta 1975 en España una cuenta bancaria requería la autorización de un hombre.

A principios del siglo pasado la humanidad tenía una esperanza de vida de 32 años. Esta cifra subió a 52 en los años sesenta. Y, desde entonces, no ha hecho más que aumentar hasta alcanzar los 72 actuales. Las vacunas, el saneamiento y la higiene tiene buena parte de la culpa de este fenómeno.

En 1970, el 26% de la población mundial aún vivía en condiciones de extrema escasez (en Asia oriental, el lugar donde vive la mayor parte del planeta, la cifra se elevaba por encima del 50%). Hoy el porcentaje se ha reducido al 5%. Sigue siendo mucha gente, pero dos siglos atrás, sin embargo, los números se invertían: en 1820 más del 90% de la humanidad vivía en condiciones objetivas de pobreza (hasta los países nórdicos eran pobres). La tendencia es clara, sostenida y muy positiva.

          Aumento del PIB en la Humanidad en la Historia.
Esto lo pueden comprobar nuestros amigos que recordarán las decenas de barriadas pobres que hasta hace algunas décadas asolaban nuestras ciudades. Hoy, sigue existiendo “pobreza comparativa”, pero los pobres viven mucho mejor que hace 100 años. De hecho, actualmente una cama estándar de cualquier persona, incluso “pobre” es mucho mejor que la cama que tenía el Rey de Inglaterra hace 1000 años.

Los homicidios pese a tener el impacto mediático explicado párrafos arriba, es menor. Actualmente hemos alcanzado niveles de seguridad ciudadana incomparables con cualquier otro momento de la historia de la humanidad. Una prueba de la mano de Max Roser: la tasa de homicidios en muchos países se ha reducido de forma notoria a lo largo de los siglos.

Por ejemplo, la tasa promedio mundial actual es de 7 u 8 homicidios por cada 100.000 habitantes. Pero en la Edad Media los niveles de homicidios llegaban a 70 por cada 100.000 habitantes. Repito: Hoy, los crímenes tienen un impacto, no porque sean mayores que en la antigüedad; sino porque hay una mayor sensibilidad cerebral que hace que la Sociedad se impacte y vea de forma negativa estos hechos.

Hay muchas áreas en las que el mundo es mejor que antes. No es lo óptimo. Aún hay muchos problemas, pero la Sociedad es más sensible, es más civilizada y es más estable. Lo que sucede es que esta generación no ha visto la miseria de las generaciones anteriores. No ha visto la rudeza de los tiempos antiguos, y se queja demasiado, sin detenerse a reflexionar y valorar lo que se ha logrado.

Sí, si lees estas líneas y piensas que el mundo es terrible, que tu vida es terrible y que todo va en contra, medita en que tus antepasados apenas tenían tiempo para amargarse la vida:

(901.5) 81:2.2 Vosotros que vivís ahora en un ambiente moderno de cultura en ciernes y de progreso incipiente en asuntos sociales, vosotros que disponéis realmente de algunos ratos libres para pensar acerca de la sociedad y la civilización, no debéis pasar por alto el hecho de que vuestros antepasados primitivos tenían poco o ningún tiempo libre para poder dedicarlo a la reflexión cuidadosa y a la meditación social.

Debemos meditar, agradecer e intentar estar mejor al obvervar los asuntos en su perspectiva correcta.

Al hacer esto, comprendemos de forma objetiva , que el problema humano, es actualmente de insatisfacción existencial y espiritual:

99:4.6 (1090.2) Durante los tiempos psicológicamente agitados del siglo veinte, en el medio de los trastornos económicos, las corrientes encontradas de la moral y las mareas sociológicas de las transiciones ciclónicas de la era científica, miles y miles de hombres y mujeres se han dislocado humanamente; están ansiosos, desapacibles, temerosos, inseguros e inestables; como nunca antes en la historia del mundo, necesitan el consuelo y la estabilización de una religión sólida. Frente a los logros científicos y al desarrollo mecánico sin precedentes existe un estancamiento espiritual y un caos filosófico.

La religión institucional se equivoca al errar en el blanco si sigue pregonando soluciones divinas milagrosas que finalmente acaben con los problemas materiales del hombre; porque la verdadera misión de la Religión verdadera debe ser llenar el hambre espiritual del hombre y no prometer soluciones materiales. Y la política también sigue errando si persiste en aumentar psicológicamente los problemas sociales para obtener ventajas políticas. Los medios de comunicación también persisten en esos errores al enfocar los males de la Humanidad, en vez de potenciar las buenas noticias casi anónimas de todos los días (entrada pasada).

84:8.5 (942.6) Al usar la sal para sazonar el alimento, considerad que, por casi un millón de años, el hombre tan sólo podía obtener sal mojando su alimento en las cenizas.

126:5.5 (1393.2) El pago de los carpinteros jornaleros iba disminuyendo lentamente. A fines de este año Jesús podía ganar, trabajando de sol a sol, sólo el equivalente de unos veinticinco centavos de dólar diarios.

Es bueno no perder de vista la rudeza REAL de la existencia pasada, para valorar lo que hoy tenemos.

64:7.20 (729.1) Las luchas de estas primeras edades se caracterizaron por la valentía, el denuedo y hasta el heroísmo. Todos lamentamos que muchos de esos rasgos vigorosos y excelentes de vuestros antepasados primitivos hayan dejado tan poco efecto en las razas más recientes. Si bien apreciamos el valor de muchos de los refinamientos de la civilización que va avanzando, extrañamos la magnífica persistencia y la espléndida dedicación de vuestros primeros antepasados, que a veces rayaban en la grandeza y la sublimidad.

Así que la primera CURA para esta lepra mental del Hombre moderno consiste en una evaluación objetiva de la Historia, y que piense que hoy disfruta de una mejor calidad de vida, como nunca antes en la Historia del mundo. Luego debe enfocar esa visión en la búsqueda de la auténtica religión del espíritu que podrá inspirarlo en la alegría del vivir.