jueves, 11 de abril de 2013

La posibilidad del error en los ángeles

Havona y sus mundos perfectos, y lateralmente los universos locales en formación

¿Que pasa con Lucifer? Se supone que era "perfecto" y pecó. ¿Cómo explicamos la rebelión de los ángeles? ¿Acaso los seres de Havona no yerran?

Respuesta: Según los documentos, solo el universo central de Havona y la Isla Paraíso (en el interior) poseen perfección. Y sus habitantes tienen esa dote de perfección:

(52.2) 3:5.16 La plena apreciación de la verdad, de la belleza y de la bondad es inherente a la perfección del universo divino. Los habitantes de los mundos de Havona no requieren el potencial de niveles relativos de valor como estímulo para su elección; tales seres perfectos pueden identificar y elegir el bien en ausencia de toda situación moral contrastante y que obliga a pensar. Pero todos esos seres perfectos son, en naturaleza moral y estado espiritual, lo que son por virtud del hecho de su existencia. Han ganado un avance experiencial solamente dentro de su estado inherente.

Los habitantes de Havona (que no deben confundirse con los ángeles) viven en un medio ambiente tan exquisito y perfecto que practicamente  hay una ausencia de una situación moral contrastante que los obliguen a decidir entre el bien y el mal.

Miguel (Jesús) como Hijo Creador proviene de ese Universo Central y perfecto. Ese universo está completamente sincronizado, es perfecto, y está más allá del espacio-tiempo. Miguel viene de ese universo y  viaja a las afueras de ese universo central. Luego en el exterior, comienza en el espacio-tiempo el proyecto de construcción de su universo local.

Cuando Miguel establece su Sede Soberana para construir su universo local, procede a crear varias criaturas Angelicales. También procede a crear a ciertas criaturas que le ayudarán a administrar su creación.  Entre esas criaturas están los Hijos Lanonandek (Lucifer fué uno de ellos). Ellos son creados para trabajar en contacto e interacción con los mundos materiales y los seres humanos.

"Son de una utilidad aun mayor en las unidades subordinadas del universo, ya que son capaces de acercarse más a las criaturas más bajas de las razas inteligentes. También corren un mayor peligro de descarriarse, de desviarse de la técnica aceptable del gobierno universal. Pero estos Lanonandek, especialmente los de la orden primaria, son los más peritos versátiles de todos los administradores de los universos locales. En habilidad ejecutiva son solamente superados por Gabriel y sus asociados no revelados"- 392,393 L.U.

Estos seres creados por Miguel para ministrar en este universo material, incompleto y aún no sincronizado, los coloca en un medio ambiente en dónde está presente la posibilidad de situaciones morales contrastantes que los obligan a decidir. En situaciones complejas para lidiar con ambientes incompletos, las decisiones pueden llevar al error y auto-engaño. Lucifer y sus asociados utilizaron métodos erróneos desde el punto de vista cósmico para cumplir su misión, y esto provocó la rebelión al gobierno de Miguel. Además, Lucifer y sus aliados no conocían el universo de Havona. Ellos fueron creados por Miguel en la Sede (el cielo) de este universo local.

La personalidad llamada "Jefe de los Arcángeles que actúa por autoridad de Gabriel de Salvington" que presentó el documento 35 proporciona una observación personal de este asunto:

El gran número de estos Hijos que han sufrido un desliz en la integridad no es indicativo de alguna falla en sus creadores. Podrían haber sido hechos divinamente perfectos, pero fueron creados así para que pudiesen entender mejor, y acercarse más, a las criaturas evolucionarias que habitan en los mundos del tiempo y el espacio.

Nuestro universo local aún en sincronización y ajuste
De todos los universos locales en Orvonton, nuestro universo, con la excepción de Henselón, ha perdido el más grande número de esta orden de Hijos. En Uversa, es opinión general que hemos tenido tantos problemas administrativos en Nebadon debido a que nuestros Hijos de la orden Lanonandek fueron creados con un grado tan amplio de libertad personal de elección y planificación.

No hago esta observación con intenciones críticas. El Creador de nuestro universo tiene pleno poder y autoridad para hacer esto. Es opinión de nuestros altos gobernantes que, aunque tales Hijos de libre elección producen problemas excesivos en las primeras etapas del universo, cuando las cosas, por así decirlo, estén completamente tamizadas y bien establecidas, los beneficios de una lealtad más elevada y un servicio volitivo más pleno de parte de estos Hijos completamente probados compensarán con creces aquellas confusiones y tribulaciones de los tiempos primitivos - 393, 394- L.U.

Desde el punto de vista de Havona, estos Hijos se encuentran en un medio ambiente muy incompleto y primitivo. No poseen la perfección de los habitantes de Havona, ya que estos seres como Lucifer deben interactuar con situaciones incompletas y comenzar a decidir soluciones para contribuir a ajustar el universo.  Y es en estas situaciones cuando el juicio erróneo está latente. Cuando un mundo y universo se acerca a la Era de Luz y Vida, las posibilidades del mal se reducen.

Jesús mismo provenía de Havona, era divinamente perfecto, pero al vivir en la carne en la Tierra, tuvo la posibilidad de descarriarse en un medio ambiente imperfecto, más sujeto a la posibilidad del espejismo, de decidir entre la verdad y el error. No es que un medio ambiente material sea inherentemente malo, o negativo. No, nada de eso. Pero nos obliga a decidir constantemente con sabiduría cada día. Lo incompleto nos obliga a realizar elecciones. Y muchas veces tenemos que lidiar con situaciones complejas.

En teoría, las criaturas de Havona si fuesen establecidas en un ambiente incompleto como nuestro mundo, tendrían la oportunidad de elegir bajo otro tipo de circunstancias.

Por esa razón, nosotros somos la admiración de toda la creación Central y Perfecta, y ellos se beneficiarán de nuestra asociación con nosotros cuando lleguemos a los mundos de Havona, y luego a las puertas del Paraíso, la Isla Nuclear de Luz.