martes, 20 de agosto de 2019

Planeta Guardería


¿Cómo puede ser que los niños que están en el mundo morontial (por haber fallecido prematuramente en la Tierra) tengan que, llegado un punto, decidir si quieren sobrevivir o dejar de existir? ¿No son demasiado pequeños e "inmaduros" para una decisión vital como esa? ¿Es que acaso maduran mucho antes en las esferas morontiales? - Javi

Añadiendo una inquietud. Si los niños tienen que elegir estando ya en los en los mundos moronciales, no disponen acaso de un mayor conocimiento de las realidades de Dios? Sería más fácil para ellos elegir el camino hacia Dios, No? Saludos!!!! - Jatto

Respuesta: Primero debemos comprender que el planeta "guardería" aún no es técnicamente el primer mundo de estancia donde comienza la "carrera ascendente", más bien es el mundo central a los primeros moronciales, llamado el de "los finalistas". Es evidente que si es un mundo de substancia moroncial, pero es una "guardería" de espera, y los siete mundos de estancia le orbitan. Todos éstos a la vez orbitan a Jerusem de manera más amplia.



Otro punto para tener claro es que la llegada del Ajustador (alrededor de los cinco años de edad) no es lo mismo que elegir la supervivencia eterna. 

Teniendo éstos elementos claros, veamos lo que nos dicen los Documentos, lo cual puede ser muy conmovedor y de interés sobre todo para los padres que han perdido momentáneamente a sus hijos en la muerte:

47:2.1 (531.5) Las escuelas que reciben a los infantes de Satania están ubicadas en el mundo de los finalistas, la primera de las esferas de la cultura de transición de Jerusem. Estas escuelas que reciben infantes son empresas dedicadas a la alimentación y capacitación de los hijos del tiempo, incluyendo a los que han muerto en los mundos evolucionarios del espacio antes de adquirir el estado individual en los registros del universo. En el caso de la supervivencia de uno o los dos progenitores del niño, el guardián de destino encarga a su querubín asociado como custodio de la identidad potencial del niño, dejando al querubín la responsabilidad de entregar esta alma no desarrollada a las manos de los Maestros de los Mundos de Estancia en las guarderías probatorias de los mundos morontiales.

47:2.2 (531.6) Estos mismos querubines abandonados son quienes, como Maestros de los Mundos de Estancia, bajo la supervisión de los Melquisedek, mantienen instalaciones instructivas tan amplias para la capacitación de los pupilos probatorios de los finalistas. Estos pupilos de los finalistas, estos infantes de los mortales ascendentes, están siempre personalizados en su preciso estado físico al tiempo de la muerte excepto con respecto a su potencial reproductor. Este despertar ocurre en el momento preciso de la llegada de cualquiera de los progenitores al primer mundo de estancia. Y entonces estos niños tienen toda oportunidad, como lo son, para elegir el camino celestial tal como lo hubieran hecho en los mundos en que la muerte tan prematuramente terminara su carrera.

Aquí se nos dice que éstos niños son resucitados con la edad en la que fallecieron. Pero ocurre cuando uno de los dos padres también resucita en el primer mundo de estancia. No se dará el caso en que los infantes resuciten, crezcan y luego sus progenitores les encuentren ya adultos o crecidos. En cierto sentido, la carrera de un infante, también depende de lo que sus padres hagan.

47:2.3 (532.1) En el mundo guardería, se agrupan las criaturas en período de prueba según tengan o no Ajustador, porque los Ajustadores vienen para residir en estos hijos materiales lo mismo que en los mundos del tiempo. Los hijos de edades pre-Ajustadores son criados en familias de cinco, que van en edades desde un año o menos hasta aproximadamente cinco años, o sea la edad en que llega el Ajustador.

Notamos que desde bebés menores a un año hasta niños de cinco años son agrupados en éste primer mundo en familias de cinco niños cuidados por un querubín. La edad de los cinco años es clave porque es el tiempo promedio para la llegada de los Ajustadores, incluso así ocurre en la Tierra. Ahora bien, no olvidemos que éstos niños pequeños menores de cinco años son resucitados al mismo tiempo que uno de sus padres. Entonces, ¿pueden los padres volver a ver inmediatamente a sus hijos fallecidos? La respuesta es sí:

47:1.5 (531.3) Pero sea cual fuere la experiencia de progenitor, los padres y las madres de los mundos de estancia que tienen hijos en la guardería probatoria, tienen toda la oportunidad de colaborar con los custodios morontiales de dichos niños en cuanto a su instrucción y capacitación. Estos padres tienen permiso para viajar allí y visitar hasta cuatro veces por año. Y una de las escenas más emocionantemente hermosas de toda la carrera ascendente es observar a los padres de los mundos de estancia abrazar a sus vástagos materiales en la ocasión de sus peregrinajes periódicos al mundo de los finalistas. Aunque uno de los progenitores o los dos puedan abandonar el mundo de estancia antes que el hijo, muy a menudo son contemporáneos durante una temporada.

Notamos que los padres resucitados pueden encontrarse con sus hijos pequeños hasta cuatro veces en un año y pasar temporadas indeterminadas con ellos. Los padres parten en transporte seráfico y llegan al mundo guardería, como si se pudieran viajar rápidamente de la Luna a la Tierra.  Y la pregunta que nos surge es porque son separados al momento de la resurrección y no hay una continuidad y apego permanente y constante hacia ellos. La respuesta es que la vida moroncial ya no es de estatus de procreación, supervivencia animal y de crianza nativa de los mundos humanos. Se parte con una nueva perspectiva, pero aún así los lazos de amor se mantienen fuertemente y por esa razón existen esos permisos, además existe una seguridad cósmica interna en el cuidado de los ángeles, y las ideas del temor o inseguridad animal desaparecen.

De alguna forma la vida moroncial sublima el Amor a un nivel superlativo, difícil de aceptar o imaginar incluso por nosotros. El apego es separado por una sensación amplía de confort y seguridad interior difícil de entender por nosotros. La filosofía mota nos ayudará a comprender éstos asuntos en esa vida. Así, las relaciones de pareja, de familia y de amistad cambian, ya no será igual, pero a la vez los cimientos y lazos más significativos y verdaderos, esas cuestiones del Alma, si se mantienen, y son sublimados. Los lazos del Amor jamás se pierden, pero son llevados a un nivel más allá de nuestra comprensión.

Ahora notemos:


47:2.4 (532.2) Todos los hijos en los mundos en evolución que tienen Ajustador del Pensamiento, pero que antes de la muerte no habían hecho la elección en lo que concierne la carrera al Paraíso, también son repersonalizados en el mundo de los finalistas del sistema, y del mismo modo allí crecen dentro de familias de Hijos Materiales y de sus asociados tal como lo hacen los pequeños que llegaron sin Ajustador, pero que posteriormente recibirán a los Monitores Misteriosos después de lograr la edad específica de la elección moral.


Aquí se nos habla de los niños y jóvenes que ya tienen Ajustador, pero tampoco habían hecho la elección de la carrera al Paraíso. Estos si mueren después después de los 5 años también aparecen en el mundo guardería. 


47:2.5 (532.3) Los niños y jóvenes resididos por el Ajustador en los mundos finalistas también son criados en familias de cinco, que van en edades desde seis hasta catorce años; aproximadamente, estas familias consisten en niños cuyas edades son de seis, ocho, diez, doce, y catorce años. En cualquier momento después de los dieciséis años, si se ha realizado la elección final, se trasladan al primer mundo de estancia y comienzan su ascensión al Paraíso. Algunos hacen la elección antes de esa edad y proceden a las esferas de ascensión, pero muy pocos niños por debajo de los dieciséis años, tal como se los calcula de acuerdo con los estándares de Urantia, se encuentran en los mundos de estancia.

Notamos que aquí se les agrupa desde los 6 hasta los 14 años en familias. Parece ser que después de los 15 años ya no están asociados a éstas familias, porque se dice que después de los 16 años se les podría trasladar al "primer mundo de estancia". Incluso se infiere que después de los 16 también se podría realizar dicha elección.

Así que en realidad no son niños cuando han de elegir o no la supervivencia eterna, sino que son adolescentes que han vivido en condiciones perfeccionadas donde su conocimiento es mas aventajado que si hubiesen vivido en la Tierra. Y esto podría ser cierto ya que incluso en nuestro mundo, aquellos que son adultos, posterguen su elección de sobrevivir, debido a sus circunstancias y problemas debido a la imperfección imperante.

47:2.6 (532.4) Los serafines guardianes asisten a estos jóvenes en la guardería probatoria en el mundo de los finalistas de la misma manera en que ministran espiritualmente a los mortales en los planetas evolucionarios, mientras que los fieles espornagia ministran a sus necesidades físicas. Así pues estos niños crecen en el mundo de transición hasta el momento en que hacen su elección final.

Notamos que crecen en este mundo especial. Pero no olvidemos que dicho proceso parte cuando uno de sus padres es resucitado.

47:2.7 (532.5) Una vez que la vida material ha corrido su curso, si no se ha hecho una elección para la vida ascendente, o si estos hijos del tiempo deciden definitivamente en contra de la aventura a Havona, la muerte termina automáticamente sus carreras de prueba. No hay adjudicación en tales casos; no hay resurrección de dicha segunda muerte. Simplemente llegan a ser como si no hubiesen sido.

Como notamos, podría darse el caso de decidir en contra de la carrera hacia el Paraíso. Y se habla de que "mueren" o "llegan a ser como si no hubiesen sido". ¿Desaparecen? ¿Se desintegran en esos cuerpos moronciales? No lo sabemos exactamente pero algo así como una cesación de actividad y existencia ocurre.

47:2.8 (532.6) Pero si eligen el camino paradisiaco de la perfección, inmediatamente se los prepara para trasladarlos al primer mundo de estancia, donde muchos de ellos llegan a tiempo para reunirse con sus padres en la ascensión a Havona. Después de pasar a través de Havona y lograr las Deidades, estas almas salvadas de origen mortal constituyen la ciudadanía ascendente permanente del Paraíso. Estos niños que han sido privados de la valiosa y esencial experiencia evolucionaria en los mundos de natividad mortal no entran en las filas del Cuerpo de la Finalidad.

Se nos dice que si deciden "hacer la voluntad de Dios" son llevados al primer mundo de estancia que orbita al mundo guardería. Y entonces se reúnen más permanente con sus padres (pueden ser agregados a la misma clase de ellos, etc).

Entonces en resumen:

Los niños antes de cinco años que no han recibido Ajustador son resucitados en el planeta guardería. Crecen allí hasta que hagan su elección final, después de los 16 años, y son llevados al primer mundo de estancia.

Los niños o jóvenes después de los seis años hasta los 16 años (aproximadamente) con Ajustador, y que mueren, también son llevados al planeta guardería. Crecen allí hasta que hagan su elección final, después de los 16 años, y son llevados al primer mundo de estancia.

En ambos casos, los vástagos son despertados cuando uno de sus padres también resucitan. Y sus padres pueden visitarles 4 veces al año hasta que alcancen los 16 años, y ellos escojan sobrevivir y unirse a ellos en los grupos de alumnos moronciales de avance.