Respuesta: Los Hijos del Paraíso, los cuales son los Hijos Creadores, los Avonales, etc; no necesitan "transporte" para viajar. Ellos mismos pueden viajar por sus dominios estelares, e ir y regresar al Paraiso. Por ejemplo Micael recorre sus tres millones de mundos en Nebadón, y además frecuenta asambleas de los Hijos Creadores en donde se reúnen éstos en la Presencia del Padre en el Paraíso y en las cuales conversan sobre el propósito de perfeccionar sus creaciones. Micael puede ir y venir al Paraíso, al parecer es muy viajero (tiene esa esencia de itinerante que era tan característica de su personalidad cuando estaba en Urantia. Si estudias su ministerio en la Biblia o en la parte IV del Libro de Urantia notarás cuan "inquieto" era). De hecho, se nos comenta que quizás al llegar a Salvignton (su capital), puede que con sorpresa No le encontremos allí, seguramente estará visitando como poderoso ser espiritual sus dominios estelares o quizás esté en una asamblea en el Paraíso. Todos éstos asuntos son narrados en los Documentos.
Los Hijos del Paraíso son prácticamente Dioses en sus esferas de acción. Ahora bien, no son omnipresentes, y no pueden estar en dos lugares al mismo tiempo.
Los seres humanos que algún día llegan al Paraíso y se gradúan también lograran ese nivel de viajar sin la necesidad de los "vehículos" seráficos:
39:2.10
(430.6) Aun en Salvington los mortales ascendentes no poseen formas personales
de tránsito. Los que ascienden deben depender del transporte seráfico al
avanzar de un mundo a otro hasta después del último reposo de sueño en el
círculo interior de Havona y el despertar eterno en el Paraíso. Posteriormente,
ya no dependeréis de los ángeles para trasladaros de universo a universo.