- El serafín de transporte o transporte seráfico.
- El serafín o ángel guardián, llamado también guardián del destino.
Por ejemplo, es posible que creamos que al momento de morir un serafín nos transporta al primer mundo de estancia. Hay quienes hemos creído inicialmente que nuestra alma es depositada en el serafín de transporte. También podemos haber llegado a pensar que este mismo serafín es nuestro guardián del destino.
Pues bien, una lectura más cuidosa de los Documentos nos indica que:
- Los transportes seráficos no son los serafines guardianes.
- Los transportes seráficos no trasladan el alma de un humano que muere aquí en la Tierra.
Hablemos primero del serafín guardián. Este ángel guardián del destino nos acompaña durante la vida aquí en la carne, ya sea que esté asignado a un grupo de humanos, o a personas individuales. El serafín guardián no nos abandona y al momento de la muerte, nuestra alma inconsciente es custodiada por este serafín, el cual la preserva. Al momento de la resurrección en el primer mundo de estancia, el serafín entrega el alma custodiada y ésta se reúne con el Ajustador del sujeto humano, para dar creación al cuerpo moroncial y reactivación de la consciencia. Estos ángeles guardianes tienen la capacidad de trasladarse por sí mismos a los mundos de estancia y llevar a sus almas custodias archivadas, sean miles o una. Pero este ángel no es un serafín de transporte.
Un serafín de transporte en cambio se lo pasa viajando y su función es transportar a seres celestiales y moronciales, incluyendo a adanes planetarios. Con semejante actividad no podría dedicarse a acompañar a un ser humano aquí en la Tierra, como un ángel guardían.
Un humano al momento de morir no utiliza este servicio de transporte seráfico.
Solo comienza a usar a los transportes seráficos desde el primer mundo de estancia en adelante, una vez que ya ha sido resucitado y reconstruido como ser moroncial, y ahí ese humano moroncial ya puede usar el servicio del transporte seráfico (descrito en entradas pasadas).
Este nuevo ser moroncial usará el transporte seráfico para visitar a las otras esferas de capacitación, visitar planetas atrasados o mundos en luz y vida, y para su ascensión formal de mundo moroncial a mundo moroncial. Aquí en la Tierra los transportes seráficos actúan para llevar a ciudadanos interplanetarios en visita (seres moronciales nativos de otros mundos), etc. Por ejemplo, uno de los primeros seres que hablaron con la comisión de contacto eran estos viajeros celestiales y estudiantes en visita oriundos de otros planetas. En el pasado los transportes seráficos trajeron a los cien de Caligastia o a los Adanes Planetarios.
Citas sobre el serafín de transporte:
39:2.13 (431.2) Los
ángeles no pueden transportar cuerpos combustibles —carne y huesos— tales como
los que tenéis ahora, pero pueden transportar todas las demás formas, desde la
morontial más baja hasta la más elevada espiritual. No funcionan en caso de
muerte natural. Cuando finalizas tu carrera terrenal, tu cuerpo permanece en
este planeta. Tu Ajustador del Pensamiento se dirige al seno del Padre, y estos
ángeles no se ocupan directamente de la reconstitución subsiguiente de tu
personalidad en el mundo de estancia de identificación. Allí tu nuevo cuerpo es
una forma morontial, una forma que puede viajar en serafín. Tú «siembras un
cuerpo mortal» en la tumba; y «cosechas una forma morontial» en los mundos de
estancia.
Aquí se aclara que la función del serafín transportador parte desde la vida moroncial en adelante, pero no desde la muerte en la carne.
39:4.15 (436.1) 5. Los
Transportadores. Éstos son los serafines de transporte que funcionan en los sistemas
locales. En Satania, vuestro sistema, llevan a los pasajeros de y a Jerusem y
sirven de otro modo como transportadores interplanetarios. Raramente pasa un
día en el cual un serafín de transporte de Satania no deposite en las orillas
de Urantia a un estudiante visitante o algún otro viajero de naturaleza
espiritual o semiespiritual. Estos mismos atravesadores del espacio algún día
te llevarán a los distintos mundos del grupo de sede central del sistema y
desde los mismos, y cuando hayas terminado la asignación en Jerusem, te
llevarán más allá, a Edentia.
Aquí se muestra como estos transportadores seráficos están muy ocupados en estas misiones de transporte interplanetario.
Sobre el guardián seráfico:
113:6.1 (1246.5)
Habiéndoos dicho algo sobre el ministerio de los serafines durante la vida
natural, intentaré informaros acerca de la conducta de los guardianes del
destino al tiempo de la disolución mortal de sus asociados humanos. Después de
tu muerte, tus registros, especificaciones de identidad y la entidad morontial
del alma humana —evolucionada por el ministerio conjunto de la mente mortal y
del Ajustador divino— son fielmente conservados por el guardián del
destino juntamente con todos los demás valores relacionados con tu existencia
futura, todo lo que constituye tu yo, tu real yo, excepto la identidad de la
existencia continuada, representada por el Ajustador que parte y la actualidad
de la personalidad.
113:6.2 (1246.6) En el
momento en que desaparece la luz piloto en la mente humana, la luminosidad
espiritual que los serafines asocian con la presencia del Ajustador, el ángel guardián se apersona ante los
ángeles comandantes, sucesivamente, del grupo, compañía, batallón, unidad,
legión y hueste; y después de haber sido debidamente registrado para la
aventura final del tiempo y del espacio, dicho ángel recibe la certificación
del jefe planetario de serafines para presentarse ante la Estrella Vespertina
(o algún otro asistente de Gabriel) que manda el ejército seráfico de este
candidato para la ascensión universal. Cuando el comandante de la más alta de
las unidades organizacionales le otorga el permiso, dicho guardián del destino procede al primer mundo de estancia y allí
aguarda la concientización de su protegido en la carne.
113:6.5 (1247.3) El
guardián serafín es el fideicomiso de custodia de los valores de sobrevivencia
del alma durmiente del hombre mortal, así como el Ajustador ausente es la
identidad de ese ser universal inmortal. Cuando estos dos colaboran en las
salas de resurrección del mundo de estancia en conjunción con la forma
morontial recién fabricada, ocurre la reconstitución de los factores
constituyentes de la personalidad del mortal ascendente.
Estos últimos son párrafos
esclarecedores, pero son solo con respecto a los guardianes del destino, pero
no es sobre los ángeles transportadores.
La confusión
La confusión suele ocurrir
por una lectura de éstos párrafos:
39:5.11 (438.4) Vuestra
idea convencional de los ángeles se ha derivado de la siguiente manera: durante
los momentos inmediatos antes de la muerte física a veces ocurre en la mente
humana un fenómeno reflexivo, y esta conciencia que se va apagando parece
visualizar algo de la forma del ángel
guardián, la cual inmediatamente se
traduce en términos del concepto habitual que de los ángeles tiene formada la
mente de ese individuo.
Es cierto que el párrafo
anterior está en el contexto del subtema de los ángeles transportadores, pero
una lectura cuidadosa del mismo párrafo nos arroja luz cuando lo leemos con
detenimiento. Hay dos formas en que la idea “convencional” de los ángeles en
Urantia se origina en la cultura humana y una está relacionada con el “ángel guardián”,
o “guardián del destino” que una persona bajo ciertas circunstancias podría
narrar antes de fallecer. Este párrafo es una especie de “alcance” que describen
los Documentos. Hay personas que antes de morir han afirmado haber visto la
aparición de un ser de luz, una especie de camarero vestido de blanco, o una
asociación con algún profeta sagrado, o familiar muerto, ya que la mente, en
palabras de los Documentos, “traduce en términos del concepto habitual que
de los ángeles tiene formada la mente de ese individuo”. Pero esta visión tiene
que ver con nuestro serafín guardián que custodiará nuestra alma moroncial al
volverse inconsciente la cual será preservada por el serafín del destino hasta
la resurrección.
Sin embargo, el párrafo
siguiente, se centra de lleno en un transporte seráfico y en la preparación
para un viaje interplanetario de un estudiante en visita en arribo o partida:
39:5.12 (438.5) La idea
errónea de que los ángeles poseen alas no se debe exclusivamente a la antigua
idea de que si volaban por el aire debían tener alas. A los seres humanos
algunas veces se les ha permitido observar a los serafines que estaban siendo
preparados para el servicio de transporte, y las tradiciones de estas
experiencias han determinado en gran parte el concepto de los ángeles que se
tiene en Urantia.
Así que las ideas sobre
los ángeles en nuestro mundo generalmente se deben a dos situaciones:
-
La mente antes
de morir puede experimentar un fenómeno reflexivo que visualiza al guardián, el
cual no necesariamente es visto con alas, sino como un ser de luz, hombre de
blanco etc. Hay personas que han descrito que “ven eso” antes de fallecer.
-
Hay personas (vivas como Ezequiel) que han sido autorizadas gracias al trabajo de los controladores mecánicos
(tema anterior) a visualizar toda la operación de un transporte de seres
interplanetarios (que no son almas de difuntos). Ahí se han visto las “alas” de
los transportadores.
Bendiciones y gracias.