(1646.2) 146:7.1 En Endor Jesús escapó por
unos días de las multitudes clamorosas en búsqueda de curación física. Durante
su estadía en este lugar el Maestro rememoró para instrucción de sus apóstoles
la historia del rey Saúl y la bruja de Endor. Jesús les dijo claramente
a sus apóstoles que los seres intermedios rebeldes y descarriados que a menudo
habían asumido la personalidad de supuestos espíritus de los muertos,
serían puestos pronto bajo control para que no pudieran volver a hacer estas
cosas extrañas. - Libro de Urantia.
Aquí
notamos como Jesús declaró que "los seres
intermedios rebeldes y descarriados que a menudo habían asumido la personalidad
de supuestos espíritus de los muertos" eran los que fingian ser almas de
difuntos. Esto se dió con mayor fuerza hasta la época de Cristo, y dió origen a la amplia gama de leyendas fantasmales.
(863.5) 77:7.4 Estos seres intermedios desleales, sobre todo los asociados de Beelzebú, el jefe de los seres intermedios apóstatas, podían dejarse ver a los ojos mortales bajo ciertas circunstancias. Pero no hay que confundir a estas criaturas singulares con los querubines y serafines rebeldes que también estaban en la tierra hasta el momento de la muerte y resurrección de Cristo. Algunos de los escritores más antiguos tuvieron a estos rebeldes seres intermedios por espíritus malignos y demonios, y a los serafines apóstatas, por ángeles malos.
No obstante, según la Revelación de Urantia, Jesús al resucitar puso bajo control a muchos de los demonios. Algunos redactores del nuevo testamento lograron captar parte de esta situación y escribieron:
" Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo". - 1 Juan 3:8
"Por lo tanto, puesto que los “hijitos” son partícipes de sangre y carne, él también de igual manera participó de las mismas cosas, para que por su muerte redujera a nada al que tiene el medio para causar la muerte, es decir, al Diablo;" - 1 Pedro 2:14
Las palabras anteriores narran parcialmente que la tras la muerte de Cristo se puso fin formalmente a la libertad planetaria de la mayoría de los demonios rebeldes que deambulaban en la Tierra. Esto se describe al decir que las obras del diablo y su influencia comenzaron a ser reducidas. La revelación otorga más detalles:
Las palabras anteriores narran parcialmente que la tras la muerte de Cristo se puso fin formalmente a la libertad planetaria de la mayoría de los demonios rebeldes que deambulaban en la Tierra. Esto se describe al decir que las obras del diablo y su influencia comenzaron a ser reducidas. La revelación otorga más detalles:
(863.2) 77:7.1 La mayoría de los seres intermedios pecaron durante la rebelión de Lucifer. Al hacer una balance de la desolación de la rebelión planetaria, entre otras pérdidas, se descubrió que, de los 50.000 originales, 40.119 se habían unido a la secesión de Caligastia.
(863.3) 77:7.2 En un principio hubo 1.984 seres intermedios secundarios, y de éstos 873 no quisieron sumarse al régimen de Micael y fueron debidamente internados en relación con la adjudicación planetaria de Urantia el día de Pentecostés.
(863.4) 77:7.3 Ambos grupos de seres intermedios rebeldes están ahora detenidos aguardando la adjudicación final de los asuntos de la rebelión del sistema. Ellos, sin embargo, realizaron muchas rarezas en la tierra antes de iniciarse la dispensación planetaria presente.
Según otras partes de los documentos, solo Caligastia (el Diablo) y Daligastia estarían libres en la Tierra como "leones rugientes", lo cual reduce las posibilidades de que ellos estén en la mayoría de los casos de contactismo y canalizaciones.
Cuando Pablo describe que tenemos una "guerra contras las fuerzas espirituales inicuas" agrega este detalle clave: "en los lugares celestiales". Pablo no dice que están en la Tierra, dice "en los lugares celestiales". La mayoría de éstas fuerzas están en "los lugares celestiales" en referencia a los mundos de detención de los rebeldes. No es una lucha "cuerpo a cuerpo" sino de característica moral y espiritual en sentido superlativo contra su pensamiento y moda de rebelión. Y principalmente es contra el "Diablo" el cual si estaría aún en nuestro mundo.
Cuando Pablo describe que tenemos una "guerra contras las fuerzas espirituales inicuas" agrega este detalle clave: "en los lugares celestiales". Pablo no dice que están en la Tierra, dice "en los lugares celestiales". La mayoría de éstas fuerzas están en "los lugares celestiales" en referencia a los mundos de detención de los rebeldes. No es una lucha "cuerpo a cuerpo" sino de característica moral y espiritual en sentido superlativo contra su pensamiento y moda de rebelión. Y principalmente es contra el "Diablo" el cual si estaría aún en nuestro mundo.
Como conclusión de esta entrada, en la vasta mayoría de los casos, las explicaciones para las canalizaciones procede del fraude y el autoconvencimiento. Una causa mínima podría ser producto de las maniobras del Diablo, pero una causa levemente mayor obedece a una cuestión que se estudiará en una entrada final sobre éste tema.
