miércoles, 6 de noviembre de 2013

La fiesta de las cabañas o sucot

Uno de los elementos que finalmente nos muestra que Esdras y un grupo de sacerdotes que regresaron de Babilonia fueron los redactores y editores finales de la mayoría de las Escrituras Hebreas radica en un detalle interesante  (otro más) que se les escapó mientras relataban los sucesos contemporáneos a ellos en el libro de Nehemías:

Y Esdras procedió a abrir el libro ante los ojos de todo el pueblo, porque sucedía que él estaba por encima de todo el pueblo; y cuando lo abrió, todo el pueblo se puso de pie.

Y al segundo día los cabezas de los padres de todo el pueblo, los sacerdotes y los levitas, se reunieron [en torno] a Esdras el copista, aun para adquirir perspicacia en las palabras de la ley.  Entonces hallaron escrito en la ley que Jehová había mandado por medio de Moisés que los hijos de Israel deberían morar en cabañas durante la fiesta del séptimo mes,  y que deberían hacer una proclamación y hacer pasar un pregón por todas sus ciudades y por toda Jerusalén, y decir: "Salgan a la región montañosa y traigan hojas de olivo y las hojas de árboles oleíferos y hojas de mirto y hojas de palma y las hojas de árboles ramosos para hacer cabañas, conforme a lo que está escrito".

 Y el pueblo procedió a salir y a traer[las] y a hacerse cabañas, cada uno sobre su propio techo y en sus patios y en los patios de la casa del Dios [verdadero] y en la plaza pública de la Puerta del Agua y en la plaza pública de la Puerta de Efraín. Así toda la congregación de los que habían vuelto del cautiverio hizo cabañas y se puso a morar en las cabañas; pues los hijos de Israel no habían hecho así desde los días de Josué hijo de Nun hasta aquel día, de modo que llegó a haber regocijo muy grande. - Nehemías 8:5, 13-17

Aquí nos muestra el relato que el pueblo no tenía idea de las fiestas de las cabañas (sucot), algo muy extraño puesto que esa festividad supuestamente tendría que haber sido transmitida oralmente aún en el destierro (aún a modo de conversación). Pero aún más extraño es que los israelitas no habían celebrado dicha fiesta desde los días de Josué.

No obstante la Obra Perspicacia dice:
 
La primera de las veinticuatro divisiones sacerdotales establecidas por David debió comenzar a servir en el templo después de la fiesta de las cabañas, puesto que el templo de Salomón se inauguró para el tiempo de esta fiesta en 1027 a. E.C. (1Re 6:37, 38; 1Cr 24:1-18; 2Cr 5:3; 7:7-10.)

Aunque no se habla explícitamente en el relato de Crónicas o en los otros libros alusivos a David y Salomón de la fiesta de las cabañas, si se dice de la fiesta "del séptimo mes" (aunque de forma interesante no entran en ninguna descripción o detalles de las mismas).


 Esto representa un anacronismo que corroboraría que Esdras diseñó las instrucciones y detalles de la fiesta narradas en Levítico, Números y Deuteronomio. Luego las hizo públicas según lo narrado en Nehemías, pero se olvidaron del leve detalle de la época de David y Salomón (narrativas también redactadas en el exilio pero hechas en otro momento y no precisamente por Esdras,  sino por otra escuela judía).

El punto es que cuando en la época de Esdras esto se hace público los asistentes reconocen que esto no se hacia desde tiempos muy lejanos (supuestamente desde la época de Josué). En realidad ellos no tenían idea de esa fiesta popular, lo cual es muy extraño en esa nación con esa carga cultural y de tradición oral.

Es notable que Esdras fue quién realmente diseñó toda la tradición judaica actual. Los judíos habían casi desaparecido como raza, tenían aplastado su orgullo nacional. Esdras revive aquel patriotismo, aquel sentimiento perdido de pueblo elegido. Pacientemente mientras estaban en Babilonia habían redactado una histórica casi épica de Israel y la habían preparado para motivar a la nación herida tras regresar del destierro. Esto era la llamada "historia sagrada", nueva e inédita para los judíos que no sabían nada de su propia historia.  Esta fuerte carga patriótica la notamos en la fuerte admonición de Esdras para apegarse a la Ley, evitar las esposas no judías, y volver a establecer todo un culto de ritual judío (de sacrificios animales), esta vez sistematizado,  diciendo que era el mismo que había recibido Moisés del propio YHWH. La fiesta del sucot  revelada por Esdras también implicaba adquirir una identidad nacional con fiestas nacionales .