Reciente representación de mujer Cro-Magnon |
Primero sería interesante leer la
entrada anterior. Es curioso como los libros de historia e incluso recientes
investigaciones intentan esquivar el origen del llamado hombre de Cro-Magnon. Los
mismos científicos reconocen que parece inadmisible que el hombre de Cro-Magnon
desciende por propia evolución del Neandertal ya que no transcurrieron muchos
años entre el uno y el otro y la evolución física alcanzada por el Cro-Magnon
debió requerir muchos más milenios. En realidad se acepta que el hombre actual
no difiere básicamente ni en postura, ni en otros rasgos físicos, del hombre de
Cromagnon, el cual se cree que es el mismo Homo Sapiens y el antepasado inmediato
del hombre moderno.
No obstante, hay unas importantes diferencias. Por ejemplo se ha descubierto que en nosotros, como Homo sapiens modernos, nuestro cerebro en los últimos 30.000 años ha disminuido su tamaño y capacidad en un 10%, es decir, de1.500 a 1.359
centímetros
cúbicos. En cambio, el hombre de Cromagnon, que hizo las pinturas rupestres de
la gruta de Lascaux (Francia) era el Homo sapiens dotado del cerebro más
grande, pero también era más fuerte que nosotros, sus actuales descendientes.
Pero no era tosco ni simiesco, ni tampoco era como el neandertal. No, el Cromagnon
incluso poseía una estatura superior al hombre moderno (superior en algunos
casos al 1,95 de altura). Para algunos científicos este individuo quizás fue el
tipo humano más evolucionado que jamás haya pisado el planeta.
No obstante, hay unas importantes diferencias. Por ejemplo se ha descubierto que en nosotros, como Homo sapiens modernos, nuestro cerebro en los últimos 30.000 años ha disminuido su tamaño y capacidad en un 10%, es decir, de
El problema para los
antropólogos es explicar como aparece semejante especie humana en la Tierra. El
hombre de Cro-magnon tuvo contacto con el Hombre de Neandertal durante las
primeras etapas del Paleolítico Superior en Europa, zona en la que hubo
poblaciones de ambas especies durante un breve periodo —hasta hace unos 29.000
años, o incluso unos 27.000 años en el sur de la Península Ibérica.
También, a pesar de ser un
cazador, aparece con una cultura y arte
superior, de forma desarrollada que irrumpe misteriosamente en la historia hace
40.000 años según la ciencia. Tiene viviendas, herramientas más avanzadas y
desarrolla una agricultura sencilla. Esto provoca un gran eslabón desaparecido
de historia.
Recordemos que en la
entrada anterior comentamos que los Documentos de Urantia explican cierto mestizaje
de los neandertales con los miembros de la raza azul. Ahora bien, tras la
llegada de Adán y Eva (que tenían una altura entre 2,5 y 3,00 metros) a la Tierra hace 37.000 años, una raza humana superior (raza violeta) aparece en la escena:
(890.3) 80:1.7 Lentamente estos hijos
migratorios del Edén se unieron con los tipos más altos de la raza azul,
vigorizando las prácticas culturales de éstos mientras que exterminaban al
mismo tiempo sin compasión los restos de las cepas de la raza neandertal. Esta
técnica de mezcla de razas combinada con la eliminación de las cepas
inferiores, produjo una docena o más de grupos viriles y progresivos de hombres
azules superiores, uno de los cuales habéis denominado los cromagnones.
Y todo encaja, incluyendo las fechas. Los descendientes directos del Edén se casan con los tipos genéticos más altos de las razas azules (algunos poseían genes neandertales), y provocan la exterminación súbita de los últimos neandertales retrasados que no se mezclaron (género extinto ya para el 28.000 antes de Cristo). Algunos paleontólogos justamente admiten esa guerra en la cual los neandertales fueron derrotados y exterminados por los cromagnones. Los cromagnones son entonces la mezcla entre la raza vigorizada azul y la raza superior adánica (de origen extraplanetario).
(890.2) 80:1.6 Los mejores
hombres azules consideraban un gran honor que se les permitiese casarse con los
adanitas. Todo hombre azul tenía la ambición de volverse tan hábil y artístico
como para ganar el afecto de una mujer adanita, y era la mayor aspiración de
las mujeres azules superiores recibir las atenciones de un adanita.
Y esta mezcla de infusión directa de pura sangre adánica provocó que los cromagnones fueran incluso superiores a nosotros en estatura, capacidad cerebral y fuerza física, mientras comenzaban a desollar su cultura inspirada por los adanitas de raza violeta.
Sin embargo, si los adanitas eran superiores y más civilizados, ¿por que ocurrió que sus hijos se enfrascaran en contiendas bélicas? La razón estuvo en la raza con la cual se mezclaron: la raza azul.
(725.3) 64:6.22 Los
primeros hombres azules fueron sensibles a las persuasiones de los maestros del
séquito del Príncipe Caligastia, y fueron confundidos sobremanera por las
subsiguientes enseñanzas depravadas de los caudillos traidores. Como otras
razas primitivas, no se repusieron nunca completamente del disturbio ocasionado
por la traición de Caligastia, así como tampoco pudieron sobreponerse del todo
a su tendencia a pelear entre sí.
(891.4) 80:3.3 La
civilización europea de este primitivo período postadánico era una mezcla única
del vigor y el arte de los hombres azules con la imaginación creadora de los
adanitas. Los hombres azules eran una raza de gran vigor, pero deterioraron
considerablemente el estado cultural y espiritual de los adanitas. Para estos
últimos fue sumamente difícil inculcar su religión a los cro-magnoides debido a
la tendencia de tantos de ellos de engañar y seducir a las doncellas. Por diez
mil años la religión en Europa se mantuvo a nivel muy bajo en comparación con
el desarrollo en la India y en Egipto.
Sin embargo, a pesar de no poder desarrollar una civilización superior, los Cromagnon dejaron vestigios de abrupto desarrollo y aparición en la Tierra.
(891.6) 80:3.5 Los pueblos
cro-magnoides eran una raza valiente y con visión. Poseían un eficiente sistema
de puericultura. Ambos padres participaban en estas tareas, y los hijos mayores
colaboraban plenamente. Todos los niños aprendían el cuidado de las cuevas, las
artes y el trabajo en piedra. A temprana edad, las mujeres eran expertas en las
artes domésticas y la agricultura primitiva, mientras que los hombres eran
hábiles cazadores y guerreros intrépidos.
(891.7) 80:3.6 Los hombres
azules eran cazadores, pescadores y recolectores de alimento; eran expertos
constructores de barcas. Fabricaban hachas de piedra, talaban los árboles,
erigían cabañas de troncos, parcialmente subterráneas y con techos de cuero.
Aún existen pueblos que construyen cabañas similares en Siberia. Los
cro-magnoides del sur generalmente vivían en cuevas y grutas.
(892.1) 80:3.7 No era
inaudito durante los rigores del invierno que sus centinelas en vigía nocturna
junto a la entrada de las cuevas se murieran congelados. Eran valerosos, pero por sobre todas las cosas eran artistas; la
mezcla adánica de pronto aceleró la imaginación creadora. El máximo del
arte del hombre azul se produjo alrededor de quince mil años atrás, antes de
los días en que las razas de tez más oscura llegaran al norte desde África a
través de España.
¿Qué sucedió con ellos? El mestizaje y el cambio climático produjo varios efectos que abortó lo que quizás podría haber sido una gran civilización.
(892.3) 80:3.9 Estos
cambios (climáticos), aunque arrojaron avances culturales, produjeron ciertas regresiones
biológicas. Durante la era cazadora previa las tribus superiores se habían
entremezclado con los tipos más altos de prisioneros de guerra e
invariablemente habían destruido a aquellos a quienes consideraban inferiores.
Pero a medida que comenzaron a establecer asentamientos y a ocuparse de la
agricultura y del comercio, comenzaron a conservar a muchos prisioneros
mediocres como esclavos. Y la progenie de estos esclavos fue la que luego tan
considerablemente deterioró a la cepa cro-magnona. Esta regresión de la cultura
continuó hasta recibir ésta un nuevo impulso del este cuando se produjo la
invasión final en masa de la Mesopotamia a través de toda Europa, la cual
absorbió rápidamente al tipo y cultura cro-magnona y dio inicio a la
civilización de las razas blancas.
Finalmente el ingreso de una oleada de Anditas (mezclas de adanitas, noditas y tribus de color) causó la desaparición de la cultura cro-magnona que se había estancado.
Actualmente, parece que la sangre adánica se ha diluido considerablemente en nosotros. Por esa razón (para desconcierto de los evolucionistas), nuestro cerebro en los últimos 30.000 años ha disminuido su tamaño y capacidad. El ciudadano promedio no es realmente inteligente y carece de imaginación creativa propia. Los primeros Cromagnon eran superiores a nosotros ya que tenían más sangre adánica.
De hecho, la mayor causa de las enfermedades genéticas modernas se debe a la disolución de la sangre adánica (que era inmune a las enfermedades), cuando ésta comenzó a mezclarse con las razas de color.
Un estudio del genoma de los habitantes de México
y de América Latina, ha podido estimar que estos pueblos tienen mayor
probabilidad en un 20% de padecer diabetes de tipo 2. El estudio publicado en
la revista científica Nature llevado a cabo por científicos de México y
Estados Unidos, dice que la variante genética SLC16A11 se ha encontrado en el
50% de los descendientes de indígenas americanos y en el 20% de las personas
del este de Asia, pero es muy rara en europeos y en africanos. Esto quizás
se deba a que la mayor infusión de sangre adánica fue en ellos, y a que los
africanos se mezclaron muy poco con otros pueblos.
Podemos concluir que la irrupción de Adán y Eva causa un gran salto en la curva genética humana, aparece el hombre actual, con potenciales superiores (incluso al hombre moderno) que desconcierta a los evolucionistas, pero que por el fracaso y la rebelión Edénica, esa carga genética se comienza a diluir y comienza la caída genética de la especie humana (aunque por razones evidentes no retrocederemos nunca al nivel anterior de la llegada de Adán, puesto que ya hemos adquirido esos pocos genes). Ahora bien, en lo que comienza a concordar la ciencia es que un grupo pequeño, pero diferente y especial, de humanos irrumpe alterando a las razas humanas, en mayor o menor grado.
Podemos concluir que la irrupción de Adán y Eva causa un gran salto en la curva genética humana, aparece el hombre actual, con potenciales superiores (incluso al hombre moderno) que desconcierta a los evolucionistas, pero que por el fracaso y la rebelión Edénica, esa carga genética se comienza a diluir y comienza la caída genética de la especie humana (aunque por razones evidentes no retrocederemos nunca al nivel anterior de la llegada de Adán, puesto que ya hemos adquirido esos pocos genes). Ahora bien, en lo que comienza a concordar la ciencia es que un grupo pequeño, pero diferente y especial, de humanos irrumpe alterando a las razas humanas, en mayor o menor grado.