Los Documentos nos señalan
con claridad que los infantes resucitan y tienen ante así la oportunidad de la
carrera eterna. Tanto los niños que recibieron un Ajustador como aquellos que aún
no habían alcanzado a recibirlo, tienen la posibilidad de tener una elección en
las “Guarderías de Prueba” en el “mundo de los finalistas” en la Sede del
Sistema:
47:2.3 (532.1) En el mundo
guardería, se agrupan las criaturas en período de prueba según tengan o no
Ajustador, porque los Ajustadores vienen para residir en estos hijos materiales
lo mismo que en los mundos del tiempo. Los hijos de edades pre-Ajustadores son
criados en familias de cinco, que van en edades desde un año o menos hasta
aproximadamente cinco años, o sea la edad en que llega el Ajustador.
Lo anterior nos indica que
un ser humano podría ser resucitado desde que nace, pero, ¿qué ocurre con los niños que
han sido abortados ya sea accidentelamente o intencionadamente? ¿Qué ocurre con
los no-nacidos?
Los Documentos no ofrecen
una respuesta directa a este asunto. Pero he llegado a intuir una maravillosa contestación. Para acercarnos a una respuesta es
menester entender lo que significa el concepto de Personalidad según los Documentos.
Para nosotros la palabra personalidad está asociada a nuestro carácter en desarrollo. Decimos que alguien tímido puede
desarrollar su personalidad, etc. Sin embargo, para el Libro de Urantia, esto
no es así. No es la descripción de Personalidad. Mas bien se nos dice que es Algo Potencial donado al
hombre:
(9.1) 0:5.11 “La personalidad del hombre mortal no es ni
cuerpo, ni mente, ni espíritu; tampoco es el alma. La personalidad es la única realidad invariable en una
experiencia por otra parte constantemente cambiante de la criatura; y une todos
los demás factores asociados de la individualidad. La personalidad es el don
único que el Padre Universal hace a las energías vivientes y asociadas de
materia, mente y espíritu, y que sobrevive con la supervivencia del alma
morontial.”
La Personalidad es algo ya
completo y listo entregado por el Padre Universal a sus Hijos individuales. Esta no se adquiere o modifica, ya viene completa, aunque contenida y no expresada. Esta por la eternidad se desplegará. Si
pudiera identificarlo con algo, diría que es aquello que hace que tu identidad y tu yo interior sea único y
exclusivo. Tu Ser verdadero fue diseñado individualmente por Dios y eres
irrepetible en toda la eternidad. Pese a que tu experiencia cambia y se
enriquece, tu Singularidad es la misma y única.
(1225.2) 112:0.2 “10. La
personalidad es única, absolutamente única: es única en el tiempo y en el
espacio; es única en la eternidad y en el Paraíso; es única cuando se la recibe
como don —no hay duplicados; es única durante cada momento de la existencia; es
única en relación a Dios —él no tiene favoritos, pero tampoco las suma entre
sí, porque no son sumables —son asociables pero no totalizables.
Mientras que el Ajustador
(que es un fragmento de la misma mente y
Personalidad de Dios), la Personalidad Humana es la identidad del individuo humano
que algún día puede escoger o no, unir su Personalidad a la del Ajustador y
sincronizar la voluntad humana y Divina.
La Personalidad es un don de Algo Potencial que contiene a nuestro verdadero Ser. Podríamos compararlo a una Semilla de un Roble. Todas las instrucciones y planos de esa semilla están como potenciales escondidos en esa semilla. Pero están listos. El roble no mutará en una flor. Está contenido y es lo que será. Solo necesita desplegarse con el tiempo. Algo así ocurre con un no nacido. Pero la gran diferencia es que maravillosamente nuestra Personalidad es mucho más que la semilla de un árbol.
Ahora bien, el Ajustador viene a morar cuando un
niño comienza a tomar decisiones morales (alrededor de los 5 años), pero la
Personalidad humana es el don otorgado al momento en que el cuerpo humano
comienza a ser formado:
(70.5) 5:6.4 “El otorgamiento de la personalidad es la
función exclusiva del Padre Universal, la
personalización de los sistemas vivientes de energía que él otorga con los
atributos de conciencia creadora relativa y con el correspondiente control en
forma de libre albedrío. No hay personalidad aparte de Dios el Padre, y no
existe personalidad ninguna sino por Dios el Padre. Los atributos fundamentales
del yo humano, así como el núcleo en forma de Ajustador absoluto de la
personalidad humana, son dones del Padre Universal, que actúa en su dominio
exclusivamente personal del ministerio cósmico.”
(194.3) 16:8.3 “La personalidad es una dotación única de
naturaleza original cuya existencia es
independiente de la dotación del Ajustador del Pensamiento y antecedente a la
misma. Sin embargo, la presencia del Ajustador aumenta la manifestación
cualitativa de la personalidad. Los Ajustadores del Pensamiento, cuando
provienen del Padre, son idénticos en su naturaleza, pero la personalidad es
distinta, original y exclusiva; y la manifestación de la personalidad está
ulteriormente condicionada y cualificada por la naturaleza y cualidades de las
energías asociadas de carácter material, mental y espiritual que constituyen el vehículo orgánico para la
manifestación de la personalidad.”
Al parecer cuando ocurre
la concepción y comienza a desarrollarse el cerebro humano para recibir la Personalidad creada por el Padre
Universal, ésta es insertada en el vehículo material y orgánico. Después de nacer, comenzará a manifestarse, al igual que esa semilla de roble.
Entonces todos las
personalidades de los seres humanos son enviadas por el Padre a todos los
humanos que habrían de nacer. ¿Qué sucede entonces con aquellos que no nacen?
Tengo la impresión de que es inevitable que lo que Dios crea y se propone pueda
ser obstruido (salvo que esa misma persona lo decida, como veremos después).
Los hombres pueden creer que pueden abortar o torcer los propósitos de Dios,
pero eso es una ilusión de la mente. Si lo que la mente de Dios proyecta y su
pensamiento de proyectar una Personalidad invariablemente se ejecuta en la materia,
estoy seguro que la personalidad de ese bebé abortado nacerá en otro bebé, quizás
en otra familia o en otro hijo, incluso quizás en otro mundo. Lo que ha de
llegar a ser inevitablemente llega a ser. Lo que Dios imagina se hace real.
En otras palabras, si yo
hubiese sido abortado, habría nacido igualmente en otra familia, en este mundo
o en otro, aunque con otro soporte físico, quizás con otros rasgos y
genes. Mi Ser existencial imaginado por Dios
inevitablemente vendría la existencia. Recordemos que nuestros padres de carne
y sangre nos proporcionan el material para nuestro recipiente corporal, pero
nuestro Ser Interno, nuestra Identidad y Personalidad llena de Singularidad Existencial es
creada por Dios y no tiene que ver con nuestro vehículo material (tal como se
hace patente cuando resucitamos).
Esto no es Reencarnación,
puesto que nuestra Personalidad es algo contenido, aún no abierto, existe en
estado potencial. Incluso el Alma (que es otra cosa) aún no aparece, puesto que el Alma es la “Hija” de
las experiencias de nuestro Ajustador y nuestra Personalidad que comienza a ser
operativa. La Reencarnación en cambio postula que seres que ya han tenido experiencias vivas
como humanos ya nacidos pueden volver. Esto aquí no es así, porque la Personalidad
no tuvo oportunidad de expresarse al ser abortado su vehículo de expresión material. Sería lógico
que esta Personalidad se manifieste en otro vehículo de expresión. Podemos desviar la energía,
pero nunca acabar con ella. Esta invariablemente se expresará en algún lado. Así
ocurre con esa Personalidad dada por Dios.
Pero al ya poder ser
expresada en un cuerpo, la Personalidad libre puede Elegir, decidir o no hacer
la voluntad de Dios. Ahora la Vida Eterna depende de la Asociación entre dos
Personalidades, entre Dos Personas: Dios y el Hombre, su Personalidad y la Persona
de Dios en el Ajustador:
(31.2) 1:7.2 “El hombre no logra la unión con Dios como una
gota de agua podría encontrar unidad con el océano. El hombre alcanza la unión
divina mediante una comunión espiritual progresiva y recíproca, una relación de personalidad con el Dios
personal, un creciente logro de la naturaleza divina a través de una
conformidad, inteligente y sincera con la voluntad divina. Dicha relación sublime sólo puede existir entre personalidades.”
Al contrario, si una
Personalidad no elige sobrevivir “ésta es absorbida en la superalma de la
creación; volviéndose parte de la Deidad del Supremo.” (1283.4) 117:4.2. Esta
Personalidad perdería la conciencia, siendo absorbida como el Potencial-Idea que
era antes de nacer, vuelve a la mente de Dios.
Parece ser que Todas las
Personalidades imaginadas e ideadas por Dios deben tener la oportunidad de
elegir al ingresar en el camino de la conciencia y dejar de ser potenciales.
Esto ocurre después de nacer y al desarrollar nuestro vehículo y obtener la Guía
del Ajustador. Por esa razón, el aborto es un crimen porque egoístamente intenta
bloquear el camino de Dios, el caudal de la Vida, aunque su camino realmente no
puede detenerse. (Una acción similar a la de Lucifer, quien intentó suprimir la libertad de elección en las criaturas). Y el daño se lo estaría haciendo a sí misma esa persona que
ciegamente cree que puede bloquear el curso de la Vida #. Nada puede detener el Propósito de Dios. Qué palabras más sabias las de Kahlil Gibran:
Tus hijos no son tus hijos
son hijos e hijas de la
vida
deseosa de si misma. No
vienen de ti, sino a través de ti y aunque estén contigo no te pertenecen. – Kahlil
Gibran
# Nota: Solo el Creador puede comprender los motivos que algunas personas han tenido, la presión de abortar, ya sea por juicio erróneo o dificultades extremas. Si ha existido arrepentimiento sincero de corazón, nuestro Padre perdona nuestros errores.