Aspecto erróneo de Andón y Fonta |
Algunos estudiosos de los
Documentos han colocado ciertas imágenes relativas a Andón y Fonta con aspecto
de simio. Es cierto que una lectura algo rápida y superficial puede generarnos esa impresión,
pero un análisis más cuidadoso nos señala que no tenían realmente ese aspecto.
Hay lectores que han
confundido a los gemelos protohumanos con los gemelos posteriores de Andón y
Fonta. Sin embargo, incluso en los llamados mamíferos protohumanos, éstos
nacieron con un aspecto muy diferenciado a sus progenitores:
62:3.1 (704.6) En
comparación con sus antepasados, eran criaturitas verdaderamente hermosas. Tenían pocos pelos en el cuerpo, pero
esto no constituyó una desventaja, pues vivían en un clima cálido y estable.
62:3.2 (705.1) Estas crías alcanzaron a medir un poco más
de un metro y veinte centímetros. En todos los aspectos, eran más grandes
que sus progenitores, contando con piernas más largas y brazos más cortos.
Tenían dedos pulgares oponibles de funcionamiento casi perfecto, casi tan
eficiente como el pulgar de los humanos actuales para adaptarse a diversas
tareas. Caminaban erguidos, disponiendo
de pies casi tan bien adaptados para andar como los de las razas humanas
posteriores.
62:3.3 (705.2) Sus
cerebros eran inferiores a los de los seres humanos y más pequeños, pero muy
superiores a los de sus antepasados y, comparativamente, mucho más grandes.
Notamos que tenían “pocos
pelos en el cuerpo”, ya diferenciándose de lo que entendemos por “monos”, además
de estar erguidos. Es interesante que la descripción anterior es muy similar al
“hombre de Flores” (Homo floresiensis), apodado Hobbit, descubierto el año
2004. Media un poco más de un metro de estatura, y 25 kg de peso, su cerebro de menos de 400 cc.
Sin embargo, estas
criaturas aún no eran Andón y Fonta. De hecho, mucho después aparecieron otras
criaturas más similares al hombre, que también eran gemelos (pero no aún Andón
y Fonta):
62:4.1 (706.5) Volviendo
al nacimiento de los gemelos superiores, un macho y una hembra, a los dos
destacados miembros de la tribu de los mamíferos intermedios: estas crías
fueron de una índole insólita; tenían
aún menos pelos en el cuerpo que sus padres y, de muy pequeños, ya insistían en
caminar erguidos. Sus antepasados siempre aprendían a caminar sobre las
patas traseras, pero estos primates gemelos se irguieron desde el principio. Alcanzaron a medir más de un metro y medio
de altura, y sus cabezas crecieron más en comparación con las de los demás
de la tribu. Aunque aprendieron, a temprana edad, a comunicarse el uno con el
otro por medio de señas y sonidos, nunca pudieron hacer que su pueblo
entendiera estos símbolos nuevos.
Notamos que ya tenían
menos pelos y era más altos. De estos primates (el término “primate” también es
usado en la ciencia para referirse a los humanos) se nos dice:
62:4.4 (707.3) Los
primates eran más humanos y menos animales que sus predecesores del grupo
mamífero intermedio. Las dimensiones del esqueleto de esta especie nueva eran muy similares a las de las razas humanas
primitivas. El tipo humano de mano y pie había llegado a su pleno
desarrollo, y estas criaturas sabían
caminar y hasta correr tan bien como cualquiera de sus descendientes humanos
posteriores.
Aspecto erróneo de los Gemelos |
62:4.4 (707.3) El mayor
uso de las manos contribuyó mucho al desarrollo de su capacidad cerebral
inherente, pero aún no contaban con mentes que se pudieran llamar en verdad humanas.
Pasaron novecientas
generaciones para que otra pareja de gemelos naciera y fueran realmente los
primeros humanos, llamados Andón y Fonta:
62:5.2 (707.8) Estas dos
notables criaturas fueron verdaderos seres humanos. Contaban con dedos pulgares
perfectamente humanos, como los habían tenido muchos de sus antepasados, y
tenían los pies tan perfectos como los de las razas humanas presentes.
Caminaban y corrían, no trepaban; la función de asir con el dedo gordo del pie
había desaparecido completamente. Cuando el peligro les inducía a subirse a las
copas de los árboles, trepaban tal como lo harían los humanos de hoy en día.
Ellos tuvieron emociones
equiparables a la adoración y su prole inmediata fueron llamados andonitas. El siguiente párrafo los
describe físicamente:
63:4.1 (713.7) El hombre
primitivo —los andonitas— tenían los
ojos negros y la tez morena, algo como la de un cruce entre la raza amarilla y
la roja. La melanina es una sustancia colorante que se encuentra en la piel
de todos los seres humanos. Es el pigmento original de la piel andónica. En cuanto al aspecto general y al color de
la piel, estos primeros andonitas se parecían más a los esquimales de hoy en
día que a ningún otro tipo de ser humano viviente. Fueron las primeras
criaturas en servirse de las pieles de los animales para protegerse del frío; tenían un poco más de pelo en el cuerpo que
los humanos de hoy en día.
Aspecto correcto de Andón y Fonta y los andonitas. |
Asi que las ilustraciones
casi de simios que colocan algunos lectores uranticos están erradas. Ya por
muchas generaciones anteriores las criaturas pasadas habían dejado el aspecto
de simio peludo. Y más aún con Andón y Fonta, sus rasgos eran muy similares a
los llamados “esquimales” actuales.
Los andonitas no andaban desnudos y peludos
como algunos piensan, sino que se cubrían con pieles como los esquimales de hoy (no confundir que los esquimales sean andonitas, solo son similares en su aspecto).
Lamentablemente algunos descendientes posteriores de los andonitas se mezclaron con tribus inferiores de aspecto más animal simio y dieron origen a los múltiples problemas genéticos actuales, creando cierta degradación y provocando la aparición de especies que vuelven locos a los investigadores modernos que intentan hacer catálogos.
He publicado esta entrada, porque creo que debemos ser un poco más precisos al analizar los Documentos. Hay grupos de lectores que de buena fe, pero sin mayor rigurosidad han asociado fotografías o pinturas de "hombres monos" con los gemelos Andón y Fonta, y ésto ha provocado cierta confusión.
He publicado esta entrada, porque creo que debemos ser un poco más precisos al analizar los Documentos. Hay grupos de lectores que de buena fe, pero sin mayor rigurosidad han asociado fotografías o pinturas de "hombres monos" con los gemelos Andón y Fonta, y ésto ha provocado cierta confusión.