viernes, 27 de julio de 2018

Marte y la vida

En las últimas horas la noticia sobre un gran lago en Marte ha recorrido el mundo. Se habla de un depósito subterráneo en donde la posibilidad de la existencia de microorganismos estaría presente. También en el último tiempo se ha hablado de Encélado, una de las lunas de Saturno. Otros también hablan de Europa, una de las lunas de Júpiter. En estos casos, habrían grandes mares bajo las capas heladas de la superficie.

Es interesante que los Documentos de Urantia hablan de tres planetas en nuestro sistema solar que podrían albergar vida:


15:6.15 (173.5) En vuestro sistema solar, en el presente existen sólo tres planetas que pueden cobijar la vida. Urantia, por su tamaño, densidad y ubicación, es en muchos respectos, ideal para la habitación humana.


El contexto de la frase da a entender que se refiere a vida orgánica primitiva y  aún no inteligente, incluso posiblemente podríamos hablar de criaturas de naturaleza animal acuática como en las lunas de Saturno y Júpiter. Así que los últimos descubrimientos sobre Marte y los otros candidatos lunares concuerdan con los Documentos. Ahora bien, igualmente en el caso de Marte, la vida no es prohibitiva del todo, ya que los Portadores de la Vida en el caso de haberla sembrado, harían ajustes radicales para una adaptación distinta de la misma:


49:2.13 (561.12)  Si existiesen criaturas inteligentes en un planeta con una atmósfera similar a la de vuestro vecino cercano, Venus, pertenecerían al grupo de superrespiradores, mientras que los que habiten un planeta con una atmósfera tan fina como la de vuestro vecino exterior, Marte, serían denominados subrespiradores.


El problema de la búsqueda de vida extraterrestre es que se presume que dicha vida debe ser similar a la terrestre, y no cuenta con el hecho de que tenga sus propias adaptaciones incluso radicales. 


En mi opinión personal, creo que los otros dos mundos con vida primitiva son las lunas de Júpiter y Saturno (con animales incluso submarinos), y que los ejemplos de Venus y Marte son para representar que los Portadores de la Vida pueden hacer ajustes radicales en la formación de la misma (en realidad en un sentido cómico nosotros somos un ajuste radical en el inicio de la vida al ser un planeta experimental).


Ahora bien, el texto que alude a los tres planetas nativos como albergadores de vida es aparte de la misteriosa esfera de los "no respiradores":


49:3.6 (564.2) Mucho os podría interesar la conducta planetaria de este tipo de mortales porque una raza de seres de este tipo habita una esfera muy cercana a Urantia.


El contexto indica que en este caso de los "no respiradores", ellos viven en asteroides o planetoides tipo nuestra Luna o Ceres ya que su tecnología avanzada les ha permitido sobrevivir allí, y por lo tanto, si están aquí en nuestro sistema solar, vivirían más bien en una especie de base o colonia:

49:3.3 (563.6)  En los mundos sin respiración las razas avanzadas deben hacer mucho para protegerse del daño por meteoros, construyendo instalaciones eléctricas que operan para consumir o desviar los meteoros. Se enfrentan con grave peligro cuando se aventuran más allá de estas zonas protegidas. Estos mundos también están sujetos a desastrosas tormentas eléctricas de una naturaleza desconocida en Urantia. Durante los tiempos de estos períodos de tremenda fluctuación de la energía, los habitantes deben refugiarse en sus estructuras especiales de aislamiento protector.