1) Los Reveladores se expresan sobre nuestro valioso potencial genético, que incluso podría ser apreciado por los seres de otros mundos. Esta cita es muy importante:
49:1.7 (560.6) El proceso de la evolución planetaria es ordenado y controlado. El desarrollo de organismos más elevados a partir de las agrupaciones más bajas de vida no es accidental. A veces el progreso evolucionario se demora temporalmente debido a la destrucción de ciertas líneas favorables de plasma vital llevadas por una especie selecta. Frecuentemente se requieren edades tras edades para recuperar y corregir el daño ocasionado por la pérdida de una sola veta superior de herencia humana. Debéis custodiar celosa e inteligentemente estas vetas seleccionadas y superiores de protoplasma vivo una vez que aparecen. La mayoría de los mundos habitados valoran estos potenciales superiores de vida mucho más que los valoráis en Urantia.
La anterior cita declara directamente que pareciera que no cuidamos nuestra herencia genética, la cual tiene una gran riqueza nativa, como si fuésemos un verdadero Amazonas galáctico. Un planeta rico de vida, posiblemente más rico que otros mundos, donde las especies vegetales y animales son más acotadas. Y esto lo iremos profundizando posteriormente.
También se declara algo muy interesante: “A veces el progreso evolucionario se demora temporalmente debido a la destrucción de ciertas líneas favorables de plasma vital llevadas por una especie selecta. Frecuentemente se requieren edades tras edades para recuperar y corregir el daño ocasionado por la pérdida de una sola veta superior de herencia humana”. Las palabras precedentes están en el contexto de los “mundos habitados” (así se llama el Documento). Los “humanos” existen en varios mundos y todo ser bípedo extraterrestre con capacidad de adoración es llamado así. Pues bien, se nos está diciendo ante nuestros ojos que de pronto algunos seres experimentan la pérdida de líneas genéticas de descendencia, y que se requieren milenios para recuperar y corregir ese daño. Posiblemente esperan edades enteras para haber logrado un desarrollo técnico, e intentar recuperar sus líneas genéticas perdidas.
Lo anterior es idéntico a lo que los extraterrestres han declarado a personas abducidas ya sea voluntariamente o involuntariamente. Por ejemplo, Próspera Muñoz declara que le pidieron “participar en un experimento altruista”. A otros se les ha transmitido algo semejante. A algunos abducidos les han dicho que su especie extraterrestre está padeciendo problemas genéticos, que no pueden reproducirse en esa era tan avanzada en la que están, y nuestro ADN y genoma tiene el secreto para ayudarles y repararles, para salvar a su misma raza. Los casos y testigos están allí, por miles, con estas palabras más o menos similares. Luego estos seres proceden a extraerles óvulos, semen, pelos, sangre, etc. También han extraído muestras de plantas, árboles o se han llevado animales, etc. No podemos ignorar el sorprendente parecido de estas declaraciones con lo expresado en el Libro de Urantia.
Ahora bien notemos lo que dicen los Reveladores: “Debéis custodiar celosa e inteligentemente estas vetas seleccionadas y superiores de protoplasma vivo una vez que aparecen”. Sin embargo, los hechos demuestran que los humanos no cuidamos nuestro genoma ni el de las especies vivientes de este planeta vergel, de este Amazonas galáctico. Las palabras anteriores fueron declaras en los años treinta. ¿Se habrán otorgado permisos especiales (Urantia habla de unos misteriosos “regímenes temporales” para los mundos en cuarentena inaugurados al tiempo de la Revelación) para que algunos planetas avanzados puedan usar a la Tierra como un Jardín Botánico, para que ellos preserven nuestro potencial genético y además puedan reparar su propia genética?
Esto tendría lógica porque los Portadores de la Vida ya no pueden intervenir en los mundos una vez que la voluntad aparece en las criaturas, y son estas mismas las que tienen que hacerse cargo en algún momento de su patrimonio genético.
La frase siguiente es sugestiva al respecto: “La mayoría de los mundos habitados valoran estos potenciales superiores de vida mucho más que los valoráis en Urantia”.
Antes de negar con la cabeza de forma instintiva y buscar bloquear la posibilidad anterior, os pido que medites y analices con mente abierta algunos testimonios de personas abducidas.
Es interesante que algunos testigos han declarado que desde la detonación de la bomba atómica en 1945 hubo una conmoción cósmica en muchos mundos, porque se estableció que tenemos el potencial de auto destruirnos. Se hizo entonces más imperativo para algunos mundos “custodiar celosamente” nuestras vetas genéticas, sobre todo al determinar que no lo habíamos hecho. Urantia había dicho más de diez años antes, que las futuras guerras con los avances científicos podrían causar “un suicidio racial”. Y no es menos interesante que el prestigioso Psiquiatra John Mack, que analizó cientos de casos de abducciones, escribió un obra final en la que exponía su preocupación por las armas nucleares, y solicitaba la erradicación urgente de las mismas.
Continuaremos en una entrada posterior, porque nos queda mucho más que contar. Se nos abre también la ventana muy importante de que somos un Mundo Experimental…
Continuará en la parte III
