La situación grave que está
ocurriendo en los países americanos como Venezuela y Brasil no es tanto una
cuestión de comunismo versus capitalismo. Más bien es la precipitación asociada
a como se hacen los asuntos unida a la corrupción. Los Documentos ofrecen
grandes consejos que los administradores políticos deberían tomar en cuenta:
(801.13) 71:2.1 A pesar de
ser la democracia un ideal, es fruto de la civilización, no de la evolución.
¡Proceded despacio, elegid con esmero!
(805.6) 71:6.2 Pero el
motivo del lucro no ha de destruirse ni eliminarse de manera repentina;
mantiene trabajando duro a muchos mortales que de lo contrario serían
perezosos.
(805.4) 71:5.4 Cierto que
la competición en la industria es excesivamente derrochadora y sumamente
ineficaz, pero no se debe aprobar ningún esfuerzo para eliminar esta desastrosa
moción económica, si tales modificaciones suponen la más mínima abolición de
cualquiera de las libertades fundamentales del individuo.
Los Documentos previenen
de las llamadas reformas económicas repentinas, si éstas suponen la generación
de un exceso de desempleo y una dependencia malsana del Estado, además de la
privación de las libertades fundamentales del individuo. Es precisamente lo que observamos en los países de socialismo duro.
Los Documentos ofrecen
esta reflexión para hallar el equilibrio:
(805.2) 71:5.2 El estado
ideal acomete la regulación de la conducta social sólo lo bastante para
eliminar la violencia de la competencia individual y para impedir la injusticia
en la iniciativa personal. He aquí el gran problema del Estado: ¿Cómo se puede
garantizar la paz y tranquilidad de la industria, pagar los impuestos para
mantener el poder del estado y, al mismo tiempo, impedir que la gravación
fiscal entorpezca la industria y que el estado se convierta en parásito o
tirano?
Este parece ser el
problema de la implementación del llamado socialismo y la estatización de todo
elemento en una nación. No deben subirse repentinamente los impuestos a las empresas y poner obstáculos a la mismas. Este es el problema de los llamados países como
Venezuela y otros gobiernos similares.
La revolución repentina política y económica siempre trae problemas debido a la incapacidad de adaptación. La adaptación necesita tiempo. El camino es la evolución.
(803.8) 71:3.8 Ninguna
sociedad ha progresado mucho permitiendo la ociosidad o tolerando la miseria.
Pero jamás podrán eliminarse la miseria y la dependencia si las cepas
defectuosas y degeneradas son mantenidas gratis y se les permite reproducirse
sin restricciones.
(803.9) 71:3.9 Una
sociedad moral debe proponerse preservar la dignidad de su ciudadanía y brindar
a todo individuo normal una oportunidad adecuada para su autorrealización. Este
plan de logro social produciría una sociedad cultural de orden superior. La
evolución social debe ser fomentada por una supervisión gubernamental que
ejerza un mínimo de control regulador. El mejor estado es aquél que coordina más
y gobierna menos.
No se trata de comunismo
versus capitalismo. La clave está en que el Estado no debe permitir la
existencia sin frenos de la industria y comercio. Éstos deben ser regulados y
coordinados por el Estado. Pero no deben ser suprimidos ni controlados por éste.
Luego, la humanidad debe ir evolucionando gradualmente hacia la cooperación, hacia un
sistema más comunitario y humano. Pero la conquista es gradual, no puede hacerse
repentinamente mediante las llamadas revoluciones.
Esto es similar a colocar andamios para lograr un buen pintado en un edificio de alturas. No colocar los andamios adecuados, aunque éstos tarden un poco en ser instalados, es sumamente peligroso para realizar un pintado adecuado y seguro, creyendo que con una escalera es más rápido.
(805.3) 71:5.3 A través de
las edades primitivas de cualquier mundo, la competencia es esencial para la
civilización progresiva. A medida que progresa la evolución del hombre, la
cooperación llega a ser cada vez más efectiva. En las civilizaciones avanzadas
la cooperación es más eficaz que la competencia. La competencia estimula al
hombre primitivo. La evolución primitiva se caracteriza por la supervivencia de
los que son biológicamente aptos, pero las civilizaciones posteriores se
fomentan mejor por la cooperación inteligente, la fraternidad compasiva y la
hermandad espiritual.
En palabras simplificadas
y burdas, podríamos decir que el capitalismo debe evolucionar gradualmente hasta
transformarse en una sociedad comunista, pero el "comunismo" sería la culminación. No puede instaurarse mientras funciona el motivo impulsor del lucro en las
edades primitivas. Los andamios son necesarios.
Cuando el comunismo se instaura repentinamente como si fuera una meta lograda causa el caos que vemos en los países
que estamos observando. Deben usarse andamios temporales para evitar los accidentes, y éstos son la industria y el comercio.
(804.1) 71:4.1 La
economía, la sociedad y el gobierno tienen que evolucionar si han de perdurar.
Las condiciones estancadas en un mundo evolucionario son indicativas de
decadencia; sólo perduran aquellas instituciones que avanzan con la corriente
evolucionaria.